Monreal se despide de la Real Sociedad

Navarra Televisión
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El navarro, a sus 36 años, no ha dado pistas sobre su futuro y ha elegido los medios oficiales del club para despedirse de la afición txuri urdin después de tres años en los que asegura haber "disfrutado mucho" y haberse sentido "muy querido".

Monreal se despide de la Real Sociedad - Foto: Javier Etxezarreta

"Me voy con muchas cosas de la Real, de San Sebastián. Me voy con un título, que tiene muchísimo mérito, y con todo el cariño de la afición. Me he sentido muy querido, como si fuera mi casa", ha señalado.

"Al presidente le he dado las gracias mil veces por haberme traído aquí y por haber podido disfrutar de esto. El cariño es mutuo y eso es con lo que me quedo", ha manifestado.

En su despedida, Monreal ha recordado sus tres años en una Real Sociedad que sorprendió a todos con su fichaje hace tres años procedente del Arsenal.

"La principal razón que me hizo venir aquí fue mi hija", ha reconocido el jugador. Además, deportivamente, "veníamos de perder una final de UEFA y eso me dejó un poco tocado. A partir de ahí decido que mi etapa en el Arsenal ha terminado".

Ha señalado que eligió a la Real porque conocía "perfectamente esta zona y este club" y "sabía que iba a encajar". En su decisión también tuvo peso la calidad de los futbolistas que tenía entonces el cuadro txuri urdin. "Veía la plantilla y me gustaba lo que había", ha comentado. "Les había visto jugar bastante y me encantaba cómo jugaban, su filosofía y el míster".

La nueva experiencia no pudo comenzar mejor: debutó con gol ante el Atlético de Madrid. "Fue el debut soñado, el día perfecto", ha asegurado un Monreal para el que en aquella primera temporada "todo fue bueno" porque "éramos uno de los equipos que mejor fútbol hacía de la Liga" y además se consiguió llegar a una final de Copa y la clasificación para la Europa League. "Fue todo maravilloso", ha remarcado.

En su segunda campaña ha señalado que "no se hablaba de otra cosa que de la final" de Copa ante el Athletic, un partido en el que sintieron "muy cómodos" porque eran "conscientes de que en ese momento estábamos un peldaño por encima del Athletic, tanto por juego como por jugadores".

Para el recuerdo siempre quedará la imagen de Monreal llorando como un niño al término de aquel partido pese a toda la experiencia que traía a sus espaldas:

"Recuerdo que fue algo muy emotivo para mí porque, aparte de ser mi primer título en España, venía de una racha malísima", ha comentado un jugador que estuvo a punto de no poder disputar aquel partido por una lesión en la rodilla. "Diez días antes de esa final estaba descartado", ha recordado.

Sin embargo, esta última temporada ha sido para olvidar debido precisamente a esa lesión de rodilla que puso en riesgo su participación en la final de Copa y que le ha hecho no poder jugar ni un solo minuto: "Ha sido el peor año de mi carrera", ha afirmado. "Ha sido un año muy duro. He sufrido muchísimo".

"Una de las cosas que me llevo de recuerdo y que más me gusta de la Real es el vestuario", ha asegurado en su adiós. "He estado en grandísimos equipos, he compartido el vestuario con estrellas y grandísimos jugadores, pero por cómo soy yo, por mi forma de ser, ha sido aquí donde realmente me he encontrado cómodo. Me he sentido como en casa", ha abundado.