La sarna es otra epidemia que ha explotado como consecuencia de la Covid-19 y lejos de remitir sigue en ascenso. Los especialistas en dermatología han notado un incremento de pacientes con esta infección en la piel. La Clínica Universidad de Navarra ha tratado bastantes casos en los últimos meses y apuntan a las condiciones de hacinamiento que hubo durante el periodo de confinamiento. 

Se trata de una infección de la piel que produce sarpullido con picazón, el cual se debe a pequeños ácaros que se adhieren a nuestro cuerpo. Una infección siempre relacionada con estigmas negativos, pero que no es tan difícil padecerla, dado que el principal contagio se debe al contacto directo. Según explican los expertos, en cualquier viaje a la hora de pasar noche en un hotel o en un lugar por el que pasan multitud de personas de diferentes países pueden producir las condiciones idóneas para que se den tales infecciones.

Los casos venían descendiendo durante los últimos diez años, hasta que la pandemia ha hecho que vuelvan a subir.