Trabajadoras de las residencias de mayores de Navarra, en huelga esta semana desde hace cinco días, se han manifestado por las calles de Pamplona en demanda de un "convenio digno" para el sector, que da empleo a 4.500 personas en Navarra, mayoritariamente mujeres.

Tras una pancarta con el lema "Residencias en lucha borrokan!! Reconoced nuestro trabajo, convenio ya! Lan baldintza duinen alde", firmada por los sindicatos ELA, UGT y LAB, han partido desde la puerta de la Casa de Misericordia y ha recorrido el centro de la ciudad hasta llegar al Ayuntamiento, mientras coreaban lemas en favor de un convenio con cuatro puntos imprescindibles, la mejora de salarios, de las jornadas anuales, del reconocimiento de las bajas y del complemento al cien por cien de las mismas.

Las trabajadoras de residencias cierran su 5º día en huelga

Lo ha explicado a los periodistas Izar Alkuaz, de LAB, quien ha valorado la "unidad intersindical" que están manteniendo estos tes sindicatos "para darle la vuelta a una situación tan adversa", que arrastra ya casi dos años de negociación de un convenio en el que piden la implicación del Gobierno de Navarra, pues aunque tan solo dos de las 74 residencias son públicas, muchas de las plazas son concertadas y soportadas por sus fondos.

Las trabajadoras de residencias cierran su 5º día en huelga"Hemos recurrido a las instituciones intentando que sean ellas las que medien entre patronal y la parte social y, aunque el Gobierno está presente en la mesa de negociación y en apariencia se han dado pasos con propuestas que en los últimos meses han venido por parte de la patronal y con implicación del Gobierno, es insuficiente y completamente irreal".

Al respecto, ha explicado que el convenio incluye una "cláusula de descuelgue, según la cual cualquier entidad o empresa que no pueda aplicar las condiciones del convenio podría descolgarse gratuitamente , sin coste ni juicio, en base a unos parámetros que ellos llaman objetivos pero no lo son".

Los sindicatos entienden que esta y otras cláusulas para un convenio son algo que no depende de las trabajadoras y "deja en papel mojado cualquier firma potencial si cualquier empresa podría dejarlo, y crearía un vacío para las trabajadoras que quedarían fuera del convenio".

Además, Alkuaz ha recalcado que "esta es la lucha de las trabajadoras de las residencias por sus condiciones laborales, pero que responde a un problema social. Por tanto entendemos que la responsabilidad de atacar este problema es conjunta en función de la centralidad que han adquirido los cuidados en la sociedad actual. Es un problema que no se reduce a las condiciones laborales de las plantillas", ha zanjado.

Por ello, ha justificado que interpelen a la sociedad, de la que precisan "el empujón que hace falta para que de una vez por todas se asuma que es un problema que los servicios públicos estén privatizados. A consecuencia de esta privatización es la precarización que se da en este sector porque es un nicho de negocio", cuando "los servicios públicos son un derecho y no un nicho de negocio".