El Gobierno francés extendió este jueves el toque de queda a otros 38 departamentos del país ante la "grave" evolución de la epidemia, con lo que a partir del viernes habrá en total 46 millones de personas afectadas por esa medida.
De los 101 departamentos franceses, los ciudadanos de 54, más los de la Polinesia francesa, deberán estar en casa desde las 21.00 de la noche hasta las 06.00 salvo que tengan motivos imperativos para salir, como laborales o sanitarios.
"Digamos las cosas claras. La situación es grave", dijo en una comparecencia ante la prensa el primer ministro francés, Jean Castex, que subrayó que "la segunda ola" ya ha llegado y se observa un avance rápido en todos los países de Europa.