El Sevilla no arranca

Curri Carrillo (EFE)
-

Los de Lopetegui se reparten los puntos contra el Valladolid, en otro partido gris de los andaluces (1-1)

El Sevilla no arranca - Foto: José Manuel Vidal

Sevilla y Valladolid empataron a uno y siguen sin ganar en esta Liga tras un partido gris, de poca calidad y con pocas ocasiones claras donde ambos conjuntos mostraron sus carencias, aunque a los pucelanos les supo mejor el punto sacado en un Sánchez-Pizjuán que pitó a los suyos al final del choque.

Tras un primer tiempo de pleno dominio del conjunto hispalense, al que le faltó acierto en el remate ante un cuadro pucelano bien organizado y concentrado en defensa, en la reanudación el ceutí Anuar Tuhami adelantó al Valladolid a los 80 minutos, aunque 6 después el neerlandés Karim Rekik salvó un punto para el Sevilla al aprovechar un fallo entre Joaquín Fernández y el meta Sergio Asenjo.

Los sevillistas, con el debut del central galo Tanguy Nianzou, salieron con mucho ímpetu, aunque sus llegadas al área de la meta de Sergio Asenjo no tuvieron éxito, como en un tiro al lateral de la red de Óliver Torres u otro del argentino Erik Lamela que dio en el poste cerca del descanso, mientras que Sergi Guardiola tuvo el 0-1 tras un grave error defensivo local, pero el meta marroquí Bono lo impidió en el 44.

Se medían dos equipos con urgencias, a pesar de estar recién iniciada LaLiga, tras sus derrotas en el debut liguero (2-1 del Sevilla en Pamplona y 0-3 del Valladolid ante el Villarreal), lo que movió a sus técnicos, Julen Lopetegui y José Rojo 'Pacheta', a introducir cinco cambios cada uno en sus respectivos onces.

Con el debut del central galo Tanguy Nianzou, sólo dos días después de ficharlo del Bayern Múnich, el Sevilla necesitaba disipar dudas después de su mala imagen en algunas fases del choque ante Osasuna. Lo mismo le ocurría al Valladolid, en el que Pacheta apostó por Sergi Guardiola en el ataque, en detrimento de Sergio León.

Los sevillistas, con un medio campo renovado respecto al de El Sadar al ser titulares Jordán y Óliver Torres junto al 'cerebro' argentino Papu Gómez, y con su compatriota Erik Lamela de extremo por el mexicano Tecatito Corona, lesionado de gravedad, salió con mucho ímpetu, a resolver pronto, con más ritmo y una presión alta.

Sin embargo, sus persistentes intentos morían cerca de la meta de Sergio Asenjo, con un disparo al lateral de la red de Óliver Torres o un cabezazo que salió alto del debutante Nianzou en torno al primer cuarto de hora, en una fase de pleno dominio sevillista y con el Valladolid achicando aguas ante la ofensiva local.

Rafa Mir, superado el ecuador del primer tiempo, buscó traducir en gol la superioridad del equipo de Lopetegui, pero su tiro raso lo abortó bien Asenjo, lo que dio paso a una estirada del cuadro pucelano, antes muy exigido y agobiado por la presión de los hispalenses, hasta que se soltó para llegar arriba con cuentagotas.

Los de Pacheta sufrieron un contratiempo con la lesión del marroquí Jawad El Yamiq, relevado por el almeriense Joaquín, si bien aguantaron bien el 0-0 hasta el descanso a pesar de algún susto, como en un balón perdido en una salida desde su área que Mir remató y solventó Asenjo, o en un tiro de Lamela que dio en el poste cerca del descanso.

Mientras, en el Valladolid, que a base de tesón, concentración y fe nunca le perdió la cara al partido, Sergi Guardiola también tuvo el 0-1 tras un grave error defensivo local, pero el meta marroquí Bono lo impidió en el 44.

En la reanudación, tras reclamar penalti Guardiola en una acción con Nianzou sin que el árbitro apreciara infracción, la falta de ideas del Sevilla se notó más. Pacheta movió ficha sacando al uruguayo Lucas Olaza por el exsevillista Escudero y Lopetegui dio entrada al marroquí En-Nesyri por Mir, al argentino Ocampos por Jordán y, poco después, a Isco Alarcón, en su debut, por el Papu.

Poco provecho sacó el Sevilla, con carencias ofensivas y bien controlado por un disciplinado Valladolid, pues En-Nesyri remató fuera un centro de Montiel y luego, en el 73, se le anuló un gol por un claro fuera de juego. Los castellanos, por su parte, siguieron a lo suyo, defendiéndose y saliendo cuando podían a la contra.

No fue en un contragolpe, pero el Valladolid aprovechó un robo del balón para marcar el 0-1 a los 80 minutos con un tiro ajustado del ceutí Anuar, tras superar a Ocampos y Rakitic, aunque la alegría le duró poco, pues en el 86 el central neerlandés Karim Rekik empató ayudado por un grosero malentendido entre Joaquín y Asenjo en su salida.

A partir de ahí, el Sevilla quemó sus naves, pero sin rumbo y sin ningún éxito, y lo que llegó fue un enfrentamiento al lado de los banquillos que desembocó en las expulsiones del local Acuña, después de que ya hubiera sido sustituido, y de un miembro del cuerpo técnico pucelano para rematar un choque bronco y agrio, en el que ninguno logró el objetivo de estrenarse.