Casi una treintena de trabajadoras de este sector y representantes sindicales se han concentrado frente a la sede del Instituto Navarro para la Igualdad (INAI) lanzando proclamas contra el Gobierno y la patronal en la que es la primera de cinco jornadas de huelga consecutivas convocadas por ELA, UGT y LAB para pedir que se retome la negociación.
El Ejecutivo foral, ha asegurado el responsable de la federación de Servicios Públicos de ELA en Navarra, Izai Bujanda, es "responsable de la situación precaria en la que se encuentran las trabajadoras" y "debería ser un elemento esencial" para mejorar la situación de estas empleadas de residencias.
Trabajadoras de residencias piden un convenio digno
Al no contar con un convenio de empresa, este sector, "castigado por la precariedad por estas dobles opresiones", ha señalado, se ve sometido a un convenio estatal que determina un salario base que "justo llega a los 1.000 euros mensuales brutos", así como a "jornadas de 1.800 horas anuales y un fin de semana de descanso al mes".
Además, ha indicado, existen otros aspectos que "castigan doblemente" a estas trabajadoras como son que la baja laboral por incapacidad temporal no esté complementada al 100 %.
Esto, ha explicado, se traduce en que personas que "ya parten con un sueldo irrisorio" únicamente cobran el complemento del 60 % cuando pasan a situación de baja médica por estar enfermas, lo que hace que en algunos casos "tengan que volver a trabajar sin estar completamente recuperadas porque la situación económica es insostenible".
Tras más de año y medio de lucha, ha manifestado Bujanda, se encuentran con "unas negociaciones bloqueadas porque nadie se está haciendo cargo" de las condiciones de estas trabajadoras.
"El Gobierno de Navarra financia por lo menos en la mitad este sector y las patronales se lavan las manos diciendo que mientras el Gobierno de Navarra no ponga dinero no va a mejorar la situación", ha relatado, señalando que, paralelamente, el Ejecutivo "dice es que únicamente es responsable de la parte que financia".
Según ha manifestado Bujanda, la elección del INAI como primer punto de reivindicación responde a que esta es una "pelea sindical" pero también "feminista con un claro sesgo de género" puesto que "mayoritariamente las trabajadoras de este sector son mujeres y además dedicadas a los cuidados".
"No se puede andar con la doble vara de tener un instituto para fomentar la igualdad entre géneros y mientras tanto mantener a miles de trabajadoras en el sector de los cuidados en una situación tan precaria, cuya vida prácticamente es insostenible por las condiciones económicas y materiales a las que están sometidas", ha referido.
Aunque no ha facilitado datos concretos, Bujanda ha asegurado que en cada una de las huelgas que ha ido promoviendo "el seguimiento es mayor porque las currelas cada vez están mas cabreadas", si bien este se ve "condicionado" por unos "servicios mínimos abusivos" del 100 % haciendo imposible sumarse a personas que querrían formar parte activa de esta lucha.