El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha culminado el diseño de sus equipos, orgánicos y parlamentarios, y ha arengado a los suyos para lograr victorias electorales que les permitan no depender de Vox, al pedir no renunciar "nunca" a obtener "mayorías amplias" que alumbren "un proyecto claro" y un "presidente libre".
Feijóo ha trazado este lunes ante su Comité Ejecutivo Nacional, al que no han acudido ni la presidenta de la Comunidad de Madrid ni el presidente de la Junta de Andalucía, el camino a seguir que comienza en las elecciones autonómicas del próximo 19 de junio en las que Juanma Moreno Bonilla pugna por continuar en San Telmo, ahora al frente de un Gobierno en solitario.
Al anunciar la nueva estructura del partido, que pretende que sea "ágil y solvente", Feijóo ha llamado a los suyos a "prepararse" para ordenar "un posible Gobierno en España" y, en una intervención que en su emisión en abierto no ha tenido menciones a Vox, ha apuntado que el PP "no ha nacido hace dos meses" ni tampoco "hace dos años" ni hace "dos décadas".
Cree Feijóo que el PP es la formación "más pegada a la realidad", la "más cercana", y que los españoles tienen claro que son la única alternativa a un Gobierno al que ha acusado de "desprestigiar" las instituciones, incluida la jefatura del Estado.
Feijóo ha sostenido que no es como el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ni como "tantísimos mesías" que han aparecido y desaparecido y tampoco como Yolanda Díaz, a la que ha acusado de ir de "liana a liana, de partido a partido" manteniendo la posición que más le interesa.
Y frente a los "líos" del Gobierno, ha recalcado que lo que preocupa al PP es la dificultad de los españoles para llegar a fin de mes o si España podrá pagar las pensiones, por lo que ha diseñado una estructura orgánica repleta de gestores -consejeros autonómicos y concejales- en ejercicio y de ex altos cargos.
Un equipo sin narcisismos ni cargos, sino con cargas y servidores públicos que a través de las propuestas y no únicamente de las denuncias muestre la política alternativa que ofrece el PP y que conduzca a una meta: llegar a la Moncloa.
"No quiero ser presidente porque los españoles no quieran a Sánchez ni a sus socios, quiero ser presidente porque España quiera que el PP gane y gobierne", ha recalcado Feijóo, que ha puesto en valor un proyecto que, ha asegurado, dice lo mismo y ofrece propuestas coherentes en toda España.
Así, Feijóo ha armado al PP con consejeros autonómicos y ex altos cargos para premiar la experiencia de gestión, ha recuperado antiguos referentes de la formación como Javier Arenas, ahora en el Senado, y ha optado por la continuidad de los portavoces parlamentarios en el Congreso, el Senado y el Europarlamento: Cuca Gamarra, Javier Maroto y Dolors Montserrat.
Los cambios en los grupos, donde Feijóo hereda a los diputados y senadores que dejó Pablo Casado, se producen en la segunda fila, con Carlos Rojas como secretario general en el Congreso, un puesto en el que tendrá un protagonismo especial al estar el presidente del partido fuera de la Cámara Baja y tener la portavoz responsabilidades orgánicas, y Amelia Salanueva en el Senado.
Además, ha creado una nueva figura que completa el desembarco de la mayor parte de su núcleo duro, la de Álvaro Pérez López, que coordinará las tres cámaras y será los ojos de Feijóo en la vida parlamentaria.
Feijóo ha asegurado que el PP ha celebrado los congresos del partido en Madrid y en Galicia, en los que Isabel Díaz Ayuso y Alfonso Rueda se han hecho con las riendas, en un proceso "con responsabilidad, ambición, resultados y sin fisuras" que permite contar con un partido "unido" y que, con viento de cola en todos los sondeos, está preparado para gobernar.
El Parlamento gallego designará mañana a Feijóo como senador autonómico y, en función de la agilidad de los trámites, el líder del PP llegará a la Cámara Alta este miércoles o ya en junio, mientras que toda la maquinaria de la formación se vuelca en las elecciones andaluzas.