Acaba de recibir el alta hospitalaria después de haber sida intervenida quirúrgicamente tras haber recibido un golpe por parte de un menor cuando trataba de evitar una agresión en las inmediaciones del Instituto Ibaialde de Burlada. Ahora le toca esperar. Tiene la mitad de la cara dormida, sin sensibilidad y espera pronto recuperar su pupila que no responde a la luz.
Marta Ripoll es profesora y directora del Instituto Ibaialde de Burlada. Hace una semana vivió uno de los peores episodios de su vida. Recuerda que salió a fumar con una compañera y estando fuera del centro vieron cómo un chico pegaba a una chica, fue entonces cuando quiso frenar la agresión: "Él se puso muy violento, le intenté tranquilizar y cuando intentó pegar a la otra chica le agarré por detrás, fue entonces cuando recibí un golpe, al parecer, con el móvil que él tenía en la mano", cuenta en Navarra Televisión.
En un primer momento intentó mediar, pero admite que el joven estaba "fuera de sí". "La situación era muy agresiva no solo física sino verbalmente", añade Ripoll. Los menores no eran del instituto.
Este episodio que, por desgracia le ha tocado vivir a esta profesora, le ha hecho ser más fuerte psicológicamente y "luchar aún más contra la violencia", admite.
"CUANDO HAY VIOLENCIA HAY QUE ATAJAR, ES LO QUE LE DIGO A MIS ALUMNOS"
Ahora está a la espera de que la justicia actúe y pide a todas las personas que cuando vivan un episodio así lo denuncien porque sino "no estamos haciendo nada". "Estoy en contra de la violencia, cuando hay violencia hay que atajar, es lo que le digo a mis alumnos", cuenta Marta Ripoll a esta casa. "Hay que luchar por evitar la violencia en todos los campos". Eso sí, aclara que "no hay que meter a toda la juventud en el mismo saco".
"Esto me ha reforzado para seguir luchando contra la violencia, se lo digo a mis alumnos la violencia lo único que genera es violencia y es lo que hay que evitar", dice tajante Ripoll.
Por delante le quedan largos meses de recuperación: "Esto va a ser largo", pero eso sí, saca la parte positiva de todo esto y es que, Marta Ripoll es ahora "más fuerte que nunca" y tiene "más ganas aún de luchar contra la violencia".