El presidente de UAGN, Félix Bariáin, ha destacado que los incendios que han afectado a Navarra desde el pasado sábado ha sido algo "dantesco, inimaginable y que nos tiene que hacer reflexionar y aprender". En este sentido, ha criticado que "los pueblos están abandonados" y ha pedido que se tengan en cuenta las propuestas del mundo rural en la gestión del medio ambiente.

En declaraciones a los medios de comunicación, Bariáin ha señalado que "no podemos cuantificar todavía la cuantía económica o el número de hectáreas totalmente calcinadas" y ha llamado a "sentarse, analizar con la cabeza fría" y "ver lo que ha fallado" que han sido "muchísimas cosas".

Según ha explicado, el sábado por la tarde se puso en contacto con la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, para pedirle que "por favor sacasen una normativa para dejar de cosechar". Ha señalado que "ya previamente muchos agricultores habían dejado de cosechar porque veían el peligro que había, pero lógicamente la forma más ejecutiva de hacerlo es que haya una norma por parte del Gobierno". Para Bariáin, desde ese momento se han producido una "serie de incendios extrañísimos", cuyo "colofón" fue el de la Sierra de Leyre "que al parecer fue intencionado".

El presidente de UAGN ha puesto en valor la labor de la gente que "ha estado en primera línea de fuego" y ha afirmado que "las eufóricas declaraciones del Gobierno no son como de verdad se han vivido en la línea de fuego". Ha asegurado que "los principales artífices de que el fuego no haya ido a más" han sido los agricultores. "Porque, a pesar de que puede que algún fuego haya sido ocasionado por cosechadoras, si la sociedad quiere comer pan, beber cerveza, comer galletas...; hay que cosechar y para cosechar no se ha inventado otra cosa que la cosechadora", ha remarcado.

"Eso hay que hacerlo, sabemos que es un oficio de riesgo, ponemos toda la prevención posible", ha afirmado Bariáin, que ha señalado que "la prevención nosotros la tenemos que hacer ahora mientras estamos desarrollando el trabajo". Sin embargo, ha resaltado que "hay otro factor de prevención que es anterior, que es cuidar de los montes, del medio rural y de nuestros pueblos". En este sentido, ha criticado que "hemos denunciado durante décadas que los pueblos están abandonados" y "cualquiera que tenga pueblo la frase que más se ha escuchado es 'el día que esto empiece a arder no para'; eso ha ocurrido en media Navarra".

Bariáin ha recalcado que "no hablo sólo de este Gobierno, porque esto viene de décadas" pero ha considerado que "colgarse ahora medallas me parece hasta insultante; lo que ha estado pasando aquí era algo que se veía venir en Navarra y en otros sitios del Estado".

"No puede ser que la normativa se dicte desde un despacho con aire acondicionado y calefacción en invierno, que la dicte alguien que no ha estado más de dos días en un pueblo, no puede ser que se dicte desde Bruselas y que a la gente de los pueblos no se nos tenga en consideración", ha rechazado. "Cuando la gente que vivimos en un pueblo decimos que lo conveniente para salvar un pueblo es esto, es que hay que hacerlo", ha manifestado Bariáin, que ha añadido que "la sabiduría popular es eso: el legado que nos dejaron nuestros abuelos y nuestros padres".

Ha lamentado que "nos han arruinado el pueblo para la siguiente generación también" y que ha criticado que "nadie va a tener responsabilidades".

Entre las medidas que ha propuesto se encuentra el "fomento de la ganadería extensiva" o el acceso a pistas ("cuando hay un incendio resulta que tienes un camino y el siguiente a uno o dos kilómetros"). También se ha referido a la normativa de la PAC que impide labrar un campo después de recoger al hierba. "En cuanto ya no hay cultivo en un campo y la ganadería no lo puede aprovechar, lo sensato y razonable es arar esa superficie porque ya no va a ser susceptible de incendios", ha subrayado.

Asimismo, ha pedido hacer cortafuegos, hacer desbroces y quemas controladas. En este sentido, ha criticado que no se pueden hacer quemas controladas cerca de un pueblo porque "necesitas una burocracia inmensa". "No permitimos quemar para que después se nos quemen superficies multiplicadas en infinito", ha reprochado.

"Ya vale de que nos dicten normas a los de los pueblos de fuera", ha sentenciado. "No nos van a dar un duro, nos vamos a despoblar, pasa todo el mundo de los pueblos en las últimas décadas, somos los últimos monos de la sociedad, ya basta", ha criticado. "Una vez que es así por lo menos, a la hora de gestionar el medio ambiente, que nos dejen opinar y nos hagan caso", ha reclamado. "No me sirve el que viene con un todoterreno una vez por semana, es que nosotros estamos las 24 horas del día y sabemos perfectamente por dónde podía entrar el fuego y por dónde podía escapar la gente", ha agregado.