Osasuna ha vuelto a Tajonar después de la segunda victoria de la temporada frente el Cádiz ante el que alcanzó los seis puntos en la tabla clasificatoria, un comienzo idílico para empezar a hacer de El Sadar un campo inexpugnable.

Los de Jagoba Arrasate volvieron a vencer en casa tras la primera jornada frente al Sevilla. La tarde del sábado se solventó con dos tantos de penalti. Chimy Ávila amplió su cuenta goleadora, mientras que Kike García se estrenó esta temporada para dotar de ilusión al osasunismo.

Este domingo, los jugadores rojillos se han dividido en dos grupos en función de su carga física. Por un lado, aquellos que actuaron como titulares han completado una sesión de recuperación, mientras que el resto se ejercitaron con mayor exigencia física a través de una activación, técnica, posesiones, finalizaciones y fútbol.

Osasuna visitará el viernes al Betis en un choque complicado que el conjunto navarro encara con energía y optimismo. El buen arranque hace que todo se vea de otra manera a como hubiese sido en caso de no haber sumado ninguno de los seis puntos en juego.

El lunes, el equipo descansará e iniciará la preparación del próximo reto a partir del martes, en una sesión que se desarrollará a puerta abierta a partir de las 10:00 horas en Tajonar.