Después de las tres victorias consecutivas entre finales de febrero y principios de marzo, los de Quique Domínguez llegaron a asentarse en las primeras posiciones de la tabla con varias jornadas por delante para certificar una gran temporada.

Sin embargo, las derrotas contra Benidorm, Puente Genil, Cangas y Barcelona han hecho que el equipo haya encallado. Lo cierto es que dos de esas cuatro caídas fueron por tan solo un gol. Ante los culés, Anaitasuna rozó un empate que hubiese retrasado el alirón blaugrana.

"Cuando juegas contra este tipo de rivales lo primero que me viene a la cabeza, y lo que les digo a mis jugadores, es que el partido se prepara exactamente igual que el anterior, desde el más absoluto respeto", afirmó Domínguez en rueda de prensa a dos días de medirse al Antequera, club que la campaña que viene jugará en Segunda al haber descendido de manera matemática.

La clasificación se ha apretado y Anaitasuna necesita una victoria cuanto antes que devuelva la confianza al grupo con el objetivo indispensable de certificar su presencia en Primera un año más lo antes posible.

Domínguez avisó a sus jugadores de que Antequera no será una plaza sencilla: "los cinco puntos que tiene los han conseguido en su casa y estoy seguro que van a querer aumentarlos, por lo que el choque se prepara con concentración y muchísimo respeto, pero con la confianza y la intención de ir a ganar".

Los errores en defensa y en ataque deberán disminuir para que el club pamplonés no tenga problemas ante un rival al que no le han salido las cosas este curso.

Helvetia Anaitasuna ocupa la undécima plaza con 21 puntos gracias a las nueve victorias, tres empates y trece derrotas que han ido acumulando desde el comienzo de la temporada en septiembre.