El escritor madrileño conocido especialmente por sus novelas policíacas, Lorenzo Silva Amador, concede una entrevista al programa 'Cara a Cara' de Navarra Televisión para hablar de lo que mejor se le da, el mundo de la literatura. 

Para Silva el alma de escritor y de contador de historias es algo que "se lleva las 24 horas del día. Donde quieras que mires hay historias que contar", dice "y cualquier persona tiene una de la que podemos aprender algo interesante para nosotros". Sobre la posibilidad de que cualquier persona pueda o no escribir, Silva tiene claro que "dedicarse a la literatura con sus riesgos e incertidumbres necesita de una vocación muy poderosa". 

"Cerca de la mitad de la población española lee muy poco o nada"

"La literatura no se basa en agasajar sino en perturbar"

El escritor madrileño pone sobre la mesa un dato que llama la atención: "Cerca de la mitad de la población española lee poco o nada, solo un 10% de los españoles leen un libro al mes". Silva cree que "es una realidad con la que debe convivir el escritor, el cuál sabe que está trabajando un artefacto minoritario". Eso sí, asegura que también hay espacio para reivindicar: "No se vende igual de bien ni con tantos recursos la lectura pero es una situación que se puede cambiar, depende de decisiones colectivas y políticas".

"La literatura es más influyente de lo que pensamos", dice el escritor, "acaba generando estados de conciencia y visiones sobre la realidad". Para Silva la literatura es como "un patrimonio desinteresadamente compartido, lo que compartes es lo que ganas"."El trabajo merece la pena cuando se consigue aquello que escribes, deja de ser tuyo y pasa a ser de otros también".

"La literatura no se basa en agasajar al lector sino todo lo contrario, perturbarlo"

"La literatura no se basa en agasajar sino en perturbar"

Lorenzo Silva busca con cada historia interesar al lector, conmoverlo: "La literatura no se basa en agasajar al que lee sino todo lo contrario, perturbarlo", dice. "Si lo que escribes no tiene una capacidad de prender la atención o de remover algo por dentro al que lee, este se desconecta y antes o después te acaba abandonando".

Lanza una pregunta al espectador: ¿A quién no le gusta una buena historia de género negro, truculenta? Para el contador de historias "el lado oscuro siempre ejerce cierta fascinación al ser humano". 

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Silva explica que en la actualidad "cuesta más escribir bien nuestra historia reciente porque hay un pensamiento en muchas cabezas que dice: no nos metamos en líos". "Si un escritor quiere desempeñar realmente bien su trabajo no solo debe asumir la necesidad de perturbar o desagradar sino también la posibilidad de perder algún lector", concluye.