El Gobierno defiende su gestión de compra de mascarillas

Navarra Televisión
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Induráin dice sobre compra de mascarillas que "todo es mejorable" pero critica que se siembren "dudas sin base".

La consejera de Salud del Gobierno de Navarra, Santos Induráin, ha afirmado, en una comparecencia sobre la compra de mascarillas de su departamento a la empresa Efficold, que, "reconociendo que todo es mejorable y abierto a críticas, sembrar ahora dudas sin base sobre actuaciones de hace dos años y en un contexto y contenidos concretos sería injusto".

Induráin ha señalado que sería "injusto sobre todo para gran número de profesionales que en un momento de incertidumbre y necesidad claras tuvieron que tomar decisiones con la finalidad de garantizar la protección del profesionales sanitarios con mascarillas y otros equipos, buscando suministros y reservas estratégicas en un contexto muy complicado".

"Aunque todos tenemos el recuerdo de la labor impagable de muchos sanitarios de a pie, en ocasiones el compromiso y la implicación sin horario y sin límite de muchos técnicos económicos y de gestión de Osasunbidea que hicieron todo lo posible por cuidar a los cuidadores ha pasado más desapercibido, y además parece que se les cuestiona", ha afirmado.

Gobierno lamenta que se Gobierno lamenta que se "siembren dudas" por las mascarillas

En cualquier caso, Induráin ha señalado que "esto no está reñido con la exigencia de legalidad, transparencia, procedencia y eficiencia, y todos los atributos que podamos pedir a la gestión pública", pero ha subrayado el "esfuerzo muy intenso" que se realizó "en un mercado internacional que estaba roto en todos los sentidos".

La consejera ha asegurado que fue una compra "necesaria y urgente" que "respetó la legalidad", que "fue y es transparente" además de "proporcionada y procedente", y "siempre abierta a aprendizaje y mejoras". Además, ha asegurado que "la oferta firmada en junio era plenamente competitiva y el precio era acorde, e incluso inferior, a los precios de mercado".

Según ha relatado, el SNS realizó una búsqueda de proveedores que fueran "cercanos" (lo cual ofrecía una "garantía de suministros con frecuencia y cantidad determinadas") y "con experiencia" (para garantizar la calidad), y se encontró a la Corporación de Mondragón.

"Al ser mascarillas fabricadas en territorio nacional, facilitarían la agilidad de la entrega y la certificación de su calidad según los estándares homologados", ha apuntado, tras añadir que "el mes de agosto de 2020 venía marcado por el crecimiento de la segunda ola, que en Navarra se inició en julio", y "la amenaza de cambio de protocolo que provocaría un mayor uso de las FPP2".

Ante esa situación, y con el objetivo "prioritario" de cumplir plazos y que los sanitarios navarros "no se vieran con riesgo de desprotección en ningún momento", la empresa de la Corporación de Mondragón "propuso entregar el mismo número de mascarillas y de la misma calidad importadas desde China".

"Digo de la misma calidad porque tenían una idéntica certificación que las que fabricaban ellos mismos pero estaban en espera de esa validación. Osasunbidea valoró la situación, verificó la realidad de la documentación técnica que avalaba la calidad de las mascarillas y aceptó este suministro que fue debidamente recepcionado y acreditado", ha subrayado Induráin, tras añadir que "dado el contexto y el margen que daba el marco de emergencia, no se realizó un cambio en el contrato -en el ámbito puramente administrativo- al ser todo exactamente según lo acordado en lo esencial".

Además, ha añadido que "la Intervención ha avalado esta gestión", y que Comptos "avaló en su informe de forma general la gestión económica del departamento en gasto Covid en el periodo marzo- diciembre de 2020".

Aunque ha reconocido que Comptos citaba en su informe el reparo suspensivo de la Intervención delegada, ha subrayado que "también es cierto que, por las circunstancias tan excepcionales y el enorme volumen de expedientes, queda pendiente un proceso de formalización administrativa de una parte de los expedientes". "Lo que no quiere decir que todas esas operaciones no estén debidamente acreditadas con su pedido, documentación que acredite la legalidad, el albarán de entrega, la recepción del material coincidente con el pedido, la factura, documento presupuestario y contable en su caso...", ha subrayado.

Por otro lado, ha destacado "la calidad de los productos adquiridos en un escenario en el que era fácil equivocarse como les sucedió por desgracia a otras comunidades". "Las 560.000 de las que estamos hablando hoy suponen por cierto el 5% de todas las adquisiciones en 2020 de mascarillas de todos los tipos, que fueron más de 11 millones de mascarillas, lo que da una idea del reto y el riesgo que suponía para los gestores en un escenario tan complejo", ha indicado Induráin, que ha considerado que el Servicio Navarro de Salud "trabajó intensamente" y "siempre contando con todos los controles pertinentes".

La consejera, que ha remarcado que "todas fueron validadas" por el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, ha manifestado que "solo el 0,6% de las todas mascarillas adquiridas tuvieron una "alerta sanitaria". En cuanto a su precio y coste económico, ha asegurado que "la oferta firmada en junio era plenamente competitiva y el precio era acorde, e incluso inferior, a los precios de mercado".

La parlamentaria de NA+ Cristina Ibarrola ha planteado a la consejera diversas cuestiones, como por qué se realizó el contrato con esta empresa y no con otras, por qué no se renegoció el precio, si eran conocedores de las mascarillas del convenio de Sodena y de "sus excedentes", o si hicieron un estudio de mercado para garantizar que el dinero público se estaba utilizando de manera "adecuada". "El precio era muy diferente en junio que en agosto, y eso es una pérdida de dinero público, ustedes compraron un 30% por encima del precio de mercado", ha criticado.

La parlamentaria del PSN Ainhoa Unzu ha pedido a Ibarrola que "aterrice" en la "realidad verdadera, y no en su universo paralelo y completamente desquiciado", tras criticar los intentos de NA+ de "embarrar este tema y liarlo absolutamente todo". "Aquí solo hay que se necesitaron mascarillas y trajeron, solo en 2020, más de 11 millones para que a ningún profesional ni paciente le faltara esa protección", ha reivindicado, tras destacar el contexto de emergencia sanitaria "completamente desconocida e imprevisible" y que la compra fue avalada por Intervención.

Por parte de Geroa Bai, el parlamentario Mikel Asiain ha destacado "lo fundamental" del contexto y se ha remitido a las explicaciones aportadas por los distintos comparecientes a lo lago de la mañana y por el informe de Comptos, que hablan de un escenario "complejo" y de "riesgo permanente".

El parlamentario de EH Bildu Adolfo Araiz ha compartido que el análisis "hay que situarlo en ese contexto", pero "eso no quiere decir que el contexto lo justifique todo". En ese sentido, ha mostrado "tremendas" dudas respecto al precio y ha considerado que deben dar "más explicaciones". "Les pudo más esa necesidad de tener mascarillas a toda costa que mirar el tema del precio", ha planteado.

El portavoz de Podemos, Mikel Buil, ha coincidido en que "era un momento en que el mercado estaba roto". "Se nos ha explicado que se hicieron consultas como mínimo a 10 empresas y los precios eran competitivos, según Intervención. No tengo por qué discrepar de eso", ha afirmado, tras añadir que la "línea roja" para su partido hubiera sido detectar una "malversación" o "comisiones abusivas".

La portavoz de I-E, Marisa de Simón, ha considerado que lo "fundamental" es que las mascarillas cumplían los requisitos de seguridad, la compra era "absolutamente necesaria", y que "han sido eficaces". En cuanto al tema del precio, ha indicado que no puede tener opinión al respecto por tener "un lío tremendo", si bien ha creído ser "capaz de intuir que cuando se firmó el contrato, el precio parece que era el justo y el correcto".