La primera edición de este congreso insta a la zonas productoras una señalización en los puntos de venta que permita identificar claramente el origen y la variedad de las alcachofas, al tiempo que anima a las personas consumidoras a dedicar unos segundos para verificar el etiquetado, tanto en fresco como en conserva, y así poder comprobar lo que compran realmente.

Este primer congreso ha contado tanto con personas expertas como productoras de Navarra, la DOP Alcachofa de Benicarló, la Asociación Alcachofa Vega Baja del Segura y la cooperativa Agrícola del Prat, todas ellas con producto de la variedad "alcachofa blanca de Tudela".

Se trata, según las conclusiones del Congreso, de "la más demandada por la industria conservera por su forma, sabor y corazón y es además reconocida en hostelería, siendo las más utilizadas por parte de los y las cocineras de las zonas representadas, que resaltan también su ternura y sabor".

Y agrega que, "como variedad autóctona, se trata de un cultivo rústico que presenta sus propias dificultades", pero se muestra convencido de que "el trabajo de los centros experimentales para desarrollar tratamientos respetuosos con el medio ambiente permitirá seguir produciendo esta variedad".