En zonas tradicionalmente húmedas como el valle de Erro están restringido el uso de agua en huertas y jardines, piscinas y tienen cortes de agua entre las diez de la noche y las ocho de la mañana. El implacable aumento del calor y la ausencia de lluvias está comprometiendo poco a poco el suministro de agua en algunas localidades de la Comunidad foral. En la Ribera, por ejemplo, la Mancomunidad de Aguas del Moncayo ordenó limitar el regadío de jardines y parques, así como el llenado de piscinas en ocho ayuntamientos de la comarca más sureña de Navarra. 

Embalses con tendencia decreciente

El nivel del pantano de Itoiz ha bajado casi un 15% en tan solo un mes y actualmente se encuentra al 53% de su capacidad. Más preocupante es la situación en Yesa con tan solo un 39% de agua embalsada, después de descender un 10% en dos semanas como consecuencia de la sequía, las altas temperaturas y la ausencia de precipitaciones. De hecho, este pantano junto al de Itoiz son los principales suministradores de agua de regadío como de consumo. Habrá que ver como evoluciona los próximos días, pero lejos de mejorar, con la alerta naranja por altas temperaturas en toda Navarra,  parece que seguirá la tendencia decreciente en todos los embalses de la geografía foral.