A poco más de dos meses para finiquitar la legislatura, los movimientos políticos se suceden para abordar la campaña electoral de las próximas elecciones municipales y autonómicas de mayo. El PSN aspira a consolidar la presidencia de María Chivite al frente del Palacio de Navarra: " La ciudadanía navarra va a revalidar su confianza en ella porque sabe gestionar", afirma convencido uno de los pesos pesados del PSN. Es su Secretario de Organización, Ramón Alzórriz, hombre de confianza de Chivite, quien mira a los próximos comicios convencido de que "no se podrá gobernar sin apoyos".

En la entrevista concedida al programa Cara a Cara de Navarra Televisión, Alzórriz ha destacado los hitos alcanzados por el Gobierno de coalición con el que "se han reforzado los servicios públicos, se han desterrado las disputas y hemos mejorado la convivencia". Un Gobierno que le gustaría repetir: "Ojalá lleguemos a 26 (mayoría en el Parlamento Foral) entre los actuales socios". Pero no oculta su preocupación ante los datos que arrojan las encuestas para su principal socio, Geroa Bai: "Me preocupa porque queremos seguir el mismo camino emprendido hace cuatro años, aunque lo que más me preocupa es conseguir más apoyos para fortalecer el ala izquierda y social del Gobierno de Navarra. Queremos que nuestros socios se mantengan fuertes pero también queremos crecer más para liderar con mayor fuerza el futuro Gobierno".

Gobierno y acuerdos con Eh Bildu 

Ramón Alzórriz , Secretario de Organización del PSN-PSOE, durante la entrevista en el programa 'Cara a cara' de Navarra Televisión

Alzórriz responde a dos cuestiones que han ocupado gran parte del debate político en la actual legislatura: la fiscalidad y los acuerdos presupuestarios con EH Bildu. Sobre lo primero sostiene que la subida de impuestos sirve para asentar los servicios públicos: "Pagan más quienes más tienen por una cuestión de solidaridad con el resto". Sobre lo segundo, los acuerdos con la coalición abertzale, se muestra convencido de que "una gran parte de la sociedad los ha entendido". Dice que "cuando uno quiere pactar tiene que asumir lo que otros proponen, no imponer. Hay que saber ceder y acordar", remarca. Con todo, asegura que "hay cuestiones identitarias sobre las que no vamos a negociar nada". De hecho, no duda en aventurar que tras las elecciones de mayo "no aceptaríamos un Gobierno junto a EH Bildu". Lo argumenta recordando que durante esta legislatura se han acordado cuestiones de carácter social, como los presupuestos, a pesar de que a EH Bildu todavía "le falta un recorrido ético" por realizar.

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Los acuerdos presupuestarios con la coalición abertzale han sido caballo de batalla entre el gobierno de María Chivite y el principal grupo de la oposición en el Parlamento Foral, Navarra Suma. La coalición que ha liderado el regionalista, Javier Esparza, termina la legislatura lejos de como la iniciaron sus socios, fracturada y cada uno por su camino de cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas de mayo. Hace unas semanas Esparza aseguraba en el programa Cara a Cara que él será presidente puesto que Pedro Sánchez y el Secretario de Organización del PSOE, el navarro, Santos Cerdán, impedirán un acuerdo entre el PSN y EH Bildu en Navarra: "No les interesa para las elecciones generales de finales de año", dijo. Alzórriz ha respondido a esas afirmaciones diciendo que "Esparza está de salida en la política Navarra. Habla de futuribles más que de realidades y no va a ser presidente del Gobierno". Para el Secretario de Organización del PSN, "Pedro Sánchez está encantado con María Chivite. La necesita como presidenta de Navarra porque fortalece su postura, a nuestro partido y a los dos gobiernos. Tiene los mismos socios presupuestarios que el Partido Socialista en Navarra y eso no va a cambiar ni ahora ni dentro de un año", ha sentenciado.