La igualdad entre ambos conjuntos en la clasificación con 21 puntos hace que se trate de rivales directos que buscan consolidar su buena temporada asentándose en los puestos altos de la tabla.

El entrenador del Helvetia Anaitasuna, Quique Domínguez se ha mostrado cauteloso y opina que encaran un partido "tremendamente complicado por lo bien que están jugando y por la buena plantilla que tienen" los alicantinos.

Anaitasuna acumula tres victorias consecutivas, una racha que buscará ampliar mañana junto a su público para que el técnico gallego alcance su cuarto partido seguido ganando, algo que no ha podido conseguir desde que aterrizó en Pamplona.

Este récord pudo darse hace unos meses. Fue precisamente en la jornada disputada en octubre en Benidorm cuando Domínguez tuvo la posibilidad de conseguirlo, pero el empate a 32 lo impidió.

Tras la eliminación copera a manos del Barcelona, Anaitasuna afronta el tramo final del campeonato con "confianza, optimismo y mucha ambición" por quedar lo más arriba posible.

El conjunto de Domínguez, séptimo en la clasificación, intentará mejorar sus números como local ya que presenta un balance de resultados muy igualado (6 victorias y 5 derrotas), conquistando 12 puntos de los 22 posibles. Anaitasuna ha logrado ganar cuatro de sus últimos cinco duelos frente a Benidorm disputados en su cancha.

Los navarros deberán ir semana a semana sin mirar más allá de ello. Esta campaña se está caracterizando por lo comprimidos que están los equipos. 11 plantillas ocupan diferentes plazas con un pequeño margen de 6 puntos entre la primera y la última de ellas.