Protestas en EEUU tras la muerte un joven negro en un arresto

Agencias
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Las manifestaciones raciales terminan con 36 detenidos y el incendio a un restaurante. La Policía de Atlanta despide al agente que disparó mortalmente contra el ciudadano afroamericano

Protestas en EEUU tras la muerte un joven negro en un arresto - Foto: ERIK S. LESSER

Al menos 36 personas han sido arrestadas en Atlanta como consecuencia de la muerte del joven de raza negra Rayshard Brooks por disparos de la Policía tras un enfrentamiento con los agentes cuando estaba siendo detenido, según ha confirmado el departamento policial de la ciudad. 

Un video de la cámara que llevaba adherida al uniforme uno de los agentes, publicado este domingo por la Policía, muestra que los oficiales hablaron durante casi media hora con Brooks antes de que comenzara la confrontación.

Brooks, de pie ante los agentes en el aparcamiento, se mantuvo calmado, confirmó que había bebido "una copa y media" y cooperó con los agentes, a los que pidió que le dejaran aparcar allí su auto y caminar hasta casa de su hermana.

Los agentes confirmaron que estaba ebrio con una prueba de alcoholemia y Bronsan intentó ponerle las esposas, pero Brooks se sacudió y los tres acabaron en el suelo, con los policías advirtiéndole de que iban a darle una descarga eléctrica si se resistía.

Otro video este sábado por el GBI muestra cómo Brooks, tras quitarles la pistola de descarga eléctrica y huir de los agentes, alargó su brazo hacia atrás y apuntó aparentemente con ese objeto a Rolfe, que le perseguía.

Rolfe agarró entonces su arma y disparó a Brooks, que cayó al suelo y fue trasladado luego al hospital local, donde murió.

Las consecuencias del suceso fueron inmediatas. El primer agente, Devin Brosnan, se encuentra bajo despido temporal administrativo. El segundo, Garrett Rolfe, presunto autor de los disparos, ha sido despedido, y la jefa de Policía de Atlanta, Erika Shields, ha dejado el cargo.

El GBI pidió que el público "no se apresure a la hora de llegar a conclusiones" sobre lo ocurrido, pero el caso de Brooks intensificó la indignación en las calles de Atlanta, que ya protestaba -como cientos de ciudades de EEUU- por la muerte de otros afroamericanos a manos de la policía, como ocurrió con George Floyd en mayo.

El escenario del crimen ha sido escenario de fuertes protestas que han culminado en el incendio provocado del restaurante antes de la intervención de la Policía, que dispersó a los concentrados con gases lacrimógenos.