La ilusión ha inundado Uscarrés tras este galardón, un pueblo que no lo esperaban. Hasta esta localidad han regresado, a lo largo de los últimos años, muchos vecinos que tuvieron que abandonar el pueblo para ir a trabajar a la Industria. Uscarrés llegó a estar habitado por una única persona pero en la década de los 90 el pueblo fue recuperando vida gracias a un grupo de vecinos que decidieron apostar por el entorno rural, creando un proyecto de vida y regresando al lugar que tuvieron que abandonar sus padres y abuelos hace años. Ahora en Uscarrés conviven unas 25 personas durante todo el año, la gran mayoría jóvenes que aseguran que el medio rural es un buen lugar para vivir y que hay oportunidades para hacerlo.
También merecedores y nominados a este premio era Ayesa y Corella.