Conocemos la historia de Jesús, un joven navarro de 23 años a quien a los 18 años le detectaron un cáncer por el que le tuvieron que colocar una prótesis de cadera. Estudiante de medicina en Zaragoza, busca recaudar fondos para adquirir una silla de ruedas con la que poder competir en su pasión: el baloncesto.
Jugador del Club Baloncesto Burlada, Ardoi y San Cernin, llegó a ganar algunas medallas, hasta que hace un lustro le detectaron un cáncer que le afectó a la cadera derecha. Tras un año de quimio y la correspondiente operación de cadera le apartaron momentáneamente del basket. Ahora solo puede competir en baloncesto en silla y lo hace en la capital aragonesa, donde estudia la profesión que considera su vocación.