El último caso detectado en Pamplona tuvo como víctima a un hombre de 76 años que se encontraba paseando por el centro. Fue abordado por una chica joven que le pidió trabajo o si sabía de alguien que se lo pudiese ofrecer. El hombre le contestó que no disponía de trabajo ni conocía a nadie que lo ofreciese. La joven con la excusa de agradecerle la información le abrazó, aprovechando ese momento para sustraerle un reloj de pulsera valorado en unos 1.000 euros.
La Policía Nacional ha advertido sobre este tipo de técnica y ha recomendado a las personas mayores y a sus familiares que estén alerta y desconfíen de desconocidos que muestren al acercarse un comportamiento poco habitual. Además, ha aconsejado no hacer ostentación de joyas u objetos de valor y no aceptar ninguna propuesta que se ofrezca por la calle.