La concentración ha reunido alrededor de un centenar de personas desde las nueve de la mañana tras una pancarta en la que se leía "Epaiketa guztien gainetik Maravillas herriarentzat" (a pesar de los juicios, Maravillas para el pueblo).
Durante la protesta se han escuchado gritos como "Maravillas aurrera" y un grupo de personas ataviadas con pelucas, gafas e instrumentos musicales ha amenizado el acto con canciones alusivas.
En total son 22 los jóvenes que van a ser juzgados por un presunto delito leve de usurpación, causa en la que está personada la Hacienda Foral como propietario del inmueble.