Todo un referente en el cine americano de los últimos 40 años, la carrera de Tom Hanks ha tocado todos los géneros interpretativos en los que le hemos visto madurar y crecer. La primera década estuvo ligada a la comedia, la siguiente fue testigo de sus papeles más famosos y premiados en el ámbito dramático y ya el siglo XXI marcado por sus colaboraciones con Spielberg, su faceta de dirección y papeles más asentados, serenos y sosegados. Ahora acaba de salir en DVD y Blu ray Un amigo extraordinario, buen ejemplo de ello.
En los 80 trabajó principalmente en el género de la comedia, consiguiendo el estrellato ya en 1980 con películas como 1,2,3… Splash (1984) donde se enamoraba de una sirena con los rasgos de una encantadora e ingenua Daryl Hannah, y Despedida de soltero. Luego vendrían Esta casa es una ruina (1986), Dos sabuesos despistados (1987) y la mítica Big y su escena en el piano gigante en 1988. Acaba la década con un año puente: por un lado, protagonizará la que sería la última película de este período, Joe contra el volcán, y por otro se adentraría en el cine dramático con La hoguera de las vanidades como adaptación de Brian de Palma de la novela homónima de Tom Wolfe.
La etapa más dorada del actor se produce en los 90, conquistando dos Oscar seguidos: Philadelphia (1993) y Forrest Gump (1994). Ambos papeles, el del defensor de la homosexualidad y los enfermos del VIH Andrew Beckett y el espíritu libre que nos muestra la historia de Estados Unidos a través de su peculiar mirada, son dignos merecedores de la estatuilla. Asimismo, nos regaló interpretaciones como la del astronauta Jim Lovell en Apollo XIII en 1995, nos introdujo en la inquietante historia de Stephen King La milla verde (1999) y puso la voz al vaquero Woody en Toy story (1995). Incluso se metió en la función de director en la película The wonders en 1996, adentrándose en el efímero y fluctuante mundo de las bandas de rock. Y para finalizar el siglo volvería a colaborar con Zemeckis en Naufrago, papel por el que volvió a ser nominado al Oscar a mejor actor.
Colaboración con Spielberg
Capítulo aparte merece su fructífera sociedad con Steven Spielberg. La primera colaboración fue Salvar al soldado Ryan (1998), por la que también fue nominado a mejor actor por su papel del capitán John H. Miller. En 2002 volverían a coincidir en Atrápame si puedes y dos años después en La terminal. Pero no solo unieron sus fuerzas en todas estas películas. También como productores en dos miniseries ambientadas en la Segunda Guerra Mundial que fueron un rotundo éxito: Hermanos de sangre (2001) y The pacific (2010).
Aparte del Rey Midas de Hollywood, otra persona que jugó un papel importante en su carrera fue Ron Howard, con el que estuvo en Apolo XIII. Yes que le dirigió para el emblemático papel de Robert Langdon de la saga de novelas de Dan Brown. Su primera encarnación sería en El código Da Vinci en 2006 con un éxito a la altura del libro. En 2009 volvería al personaje para Ángeles y demonios y, siete años después, en Inferno, cuando su carrera empezaba a decaer.
Esta decadencia empezó a sobrevenir ya en la segunda década del siglo XXI. Películas como El atlas de las nubes (2012), Capitán Phillips y Al encuentro de Mr. Banks ambas del 2013, la mencionada Inferno o la más reciente del El círculo (2017) no reportaron la satisfacción esperada. Algo mejor le fue con su última colaboración con Spielberg en El puente de los espías (2015), pero ya su carrera adolecía de agotamiento. ¿O no?
Porque cuando pensábamos que Hanks era una vieja gloria del pasado nos sorprende con Greyhound: enemigos bajo el mar. En ella vuelve al cine bélico que no tocaba desde Salvar al soldado Ryan y nos presenta un relato reivindicador de esos buques escolta de la Segunda Guerra Mundial que la Historia ignora.
En el filme es el comandante Ernest Krause en cuyo mando se encuentran tres destructores de escolta que, ante la inviabilidad de soporte aéreo, tratarán de proteger los barcos mercantes que escoltan de los ataques de varios U-Boot alemanes hasta volver a estar de nuevo bajo cobertura aérea desde Gran Bretaña. Una película épica que, dado su estreno directamente en streaming, no contará con la cobertura y despliegue que se merece, pero que de seguro redimirá la interpretación y valía de Hanks poniéndole en el lugar que se merece que, sin ser nunca demasiado prominente, sí se ha sabido labrar su sitio en Hollywood.
Y no parece que su estrella vaya a apagarse todavía porque tiene pendiente de estreno otros títulos de géneros tan dispares como el western, Noticias del mundo, el de ciencia ficción interpretando al último científico sobre la faz de la Tierra en BIOS, o el biopic del rey del rock, Elvis, siendo su papel el del coronel Tom Parker. Este actor, a sus 64 años. sigue demostrando que está en plena forma y muy lejos de jubilarse.