El presidente de la Federación Navarra de Municipios y Concejos (FNMC), Juan Carlos Castillo, se sienta 'Cara a cara' para poner el foco en los pueblos de Navarra. A raíz de la pandemia, los pueblos han sido un atractivo para pasar los meses más duros de confinamiento. Además, el problema de la despoblación está en el punto de mira, se necesitan iniciativas para atraer o retener a la juventud de los pueblos.
“Mientras no haya vacunación, difícilmente el turismo va a empezar a funcionar”
"La pandemia dejará huella, el ocio no será como antes"
El covid ha hecho que los pueblos aumenten su protagonismo y la ciudadanía no solo ya se fije en ellos como destino para ir de vacaciones o pasar unos días de verano en sus fiestas patronales. De hecho, sobre esto último, Juan Carlos Castillo dice que "no podemos pensar en unas fiestas al uso, vamos a poder hacer cosas pero pensando siempre en la salud”. Sobre el impacto que tendrá la epidemia en el ocio de los pueblos, el presidente de la FNMC lo tiene claro, “la pandemia dejará huella, el ocio después no será como lo era antes”, afirma. “El futuro del turismo rural parte de la movilidad. Mientras haya estas restricciones el sector que más se va a resentir va a ser el turismo”, sostiene.
"La pandemia dejará huella, el ocio no será como antes""Es necesario que la vacunación empiece a coger velocidad"
Con siete localidades navarras confinadas perimetralmente, lo que equivale alrededor de casi 20.000 personas con movilidad restringida dentro de su localidad, Castillo asegura que "los contagios en los pueblos tienen que ver con la cepa británica. Cuando la incidencia baja la situación se relaja y todos nos relajamos”. El presidente de la FNMC pone todas sus esperanzas en el proceso de vacunación como medida para salvar, además de vidas humanas, la vida de los pueblos: "Si no conseguimos una recuperación rápida se van a destruir muchos negocios y muchas empresas. Es necesario que la vacunación empiece a coger velocidad”, apunta.
"La mayoría de pueblos está deseando que vaya gente a vivir allí”
Uno de los mayores problemas que tienen las localidades pequeñas en la Comunidad foral es la conectividad. “El problema es que la fibra que lleva el Gobierno a los pueblos no se puede compartir. Tenemos que ser capaces de establecer medidas para que la empresas lleven internet”, recalca. En la misma línea, el presidente de la FNMC explica que "es necesario que haya internet" como reclamo de residentes y concluye que "la mayoría de pueblos está deseando que vaya gente a vivir a allí".