Cerrando heridas

Sandra Wayne
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Planeta Cómic se atreve a adaptar a la novela gráfica la apasionante obra literaria 'Patria', de Fernando Aramburu

Cerrando heridas

La gran mayoría de españoles no vivieron ese nefando atentado al centro comercial de Barcelona en 1987. Ni otras ejecuciones políticas similares. Seguramente no estuvieron en Euskadi respirando ese ambiente de tensión y división social cuando ETA actuaba. Pero aun así, conocen cada detalle de todos ellos, porque es algo que forma parte de nuestra Historia. Y hasta de nuestro mobiliario urbano repleto de placas en homenaje a víctimas del terrorismo y a inocentes que murieron por simplemente estar en un mal lugar a una mala hora.

Hubo muchos que justificaron ciertas acciones de esta banda armada, como un ejemplo de amor por su tierra y como una lucha por la libertad. Hechos que no entra a juzgar esta adaptación a novela gráfica de Patria. Sin embargo, de lo que no hay duda es que, a día de hoy, todavía siguen muchas heridas abiertas. Y parece que por desgracia seguirá así varios años más. Pedir perdón y saber perdonar es muy difícil, sobre todo cuando esta cruzada que duró demasiado se ha cobrado tantas vidas.

Realmente de eso trata Patria, un tebeo de Toni Fejzula editado recientemente por Planeta Cómic. Basándose en la novela homónima de Fernando Aramburu, aquí veremos la historia de dos familias del mismo pueblo que antaño fueron amigas. Pero uno de sus miembros es un joven etarra y otro terminará siendo víctima de esta organización terrorista. Asistiremos a cómo cada persona evolucionó a lo largo de su vida retratando al diverso colectivo de la sociedad vasca.

Artísticamente, es una maravilla. Consigue trasladar esa atmósfera propia de Euskadi, con un detallismo que va de la mano con la ambigüedad. Hay rostros poco definidos porque, posiblemente, muchos de los personajes que veremos nos recordarán a alguien de nuestro entorno. 

El dibujante consigue contar esta historia a través de pequeños cuadros con una capacidad asombrosa de llegarnos al alma, de sentirnos parte de este relato y de conseguir que nos lleguemos a emocionar. Nos plasma la vida como realmente es: llena de curvas y con cuestas. Y todo esto lo logra al cohesionar la narrativa y el arte para que funcionen con precisión, como un perfecto engranaje.

Proeza gráfica

Estamos, sin ningún género de dudas, ante una auténtica proeza gráfica capaz de conquistar incluso a aquellos que todavía siguen pensando que los cómics únicamente son productos infantiles. En ningún momento se omite la crudeza a la que se tienen que enfrentar los protagonistas tanto en el entorno familiar como en el personal.

El autor, de origen serbio, sabe mejor que nadie lo que es la ruptura entre ciudadanos de la misma tierra al conocer de primera mano las guerras acontecidas en la antigua Yugoslavia. Porque aunque todos los enfrentamientos generan dolor y sufrimiento, probablemente los más duros y de los que más cuesta pasar página son aquellos en los que los hermanos se ven separados y se matan entre ellos.

Patria es una obra valiente y emotiva que trata sobre lo difícil que resulta olvidar, perdonar y disculparse. Que habla del rencor, del miedo, de la cotidianidad y del supremacismo. 

Pero todo lo realiza de una forma sumamente objetiva e imparcial, mostrándonos los distintos ideales y los conflictos que pueden ocurrir por ellos. 

Así, el lector podrá contemplar una radiografía de la desfragmentación de un pueblo vasco que actualmente está luchando a diario para que ninguna diferencia vuelva a ser más grande que todo lo que les une.