Los 'Hispanos' se despiden de Raúl Entrerríos con un bronce

Europa Press
-

La selección española de balonmano se hace con el bronce en Tokio tras derrotar 31-33 a una combativa Egipto

Los 'Hispanos' se despiden de Raúl Entrerríos con un bronce - Foto: José Méndez

La selección española masculina de balonmano conquistó una preciada medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio tras imponerse este sábado por 31-33 a la Egipto de Roberto García Parrondo, un rival que compitió y que no hincó la rodilla hasta los minutos finales.

Los 'Hispanos' no pudieron romper su techo olímpico, pero tampoco se bajaron de él para añadir un bronce más a los de Atlanta'96, Sydney 2000 y Pekín 2008. En un duelo donde lo anímico juega un papel clave, volvieron a dejar claro que su ciclo ganador desde el disgusto de Rio 2016 no ha sido casualidad, aunque los egipcios también demostraron que su presencia en semifinales no era fruto de la fortuna.

A lo esquivo en las semifinales olímpicas, España une su pleno en los choques por el tercer puesto. Llegaba a Tokio con aspiraciones dorados, pero se marcha con una premio muy valioso por lo caro que es subir a un podio en este deporte. Además, firmó la despedida soñada para su capitán, Raúl Entrerríos, simbólico autor además del gol final que sentenció un partido donde la campeona de Europa supo sufrir y encontrar a su defensa y a Alex Dujshebaev en el momento clave.

Los 'Hispanos' se despiden de Raúl Entrerríos con un bronceLos 'Hispanos' se despiden de Raúl Entrerríos con un bronce - Foto: José Méndez

No empezó demasiado bien el asalto al bronce por parte de los 'Hispanos'. Algo erráticos en ataque, las pérdidas permitieron que el combinado norteafricano, haciendo daño en sus acciones individuales y en el juego en el pivote con Shebib, se asentara mejor pese a no poder contar con uno de sus mejores jugadores como Ali Zein.

Egipto cogió una pequeña renta, pero poco a poco la actual campeona de Europa, con paradas puntuales de Gonzalo Pérez de Vargas, se fue metiendo en el duelo con un parcial de 1-4 (5-6). España se mostraba muy efectiva en ataque, encontrando resquicios en el 6-0 de Roberto García Parrondo, pero Elahmar y Omar lograban mantener a los suyos con el partido igualado.

Sin embargo, el tramo final del primer tiempo fue positivo para los de Jordi Ribera. Las exclusiones rivales y Pérez de Vargas ayudaron a que España pudiese abrir una buena brecha de tres goles, que incluso podría haber sido mayor si se hubiese aprovechado mejor la posesión final.

 

Egipto no se rinde

Tras el descanso, los 'Hispanos' volvieron a salir atascados en ataque y el retorno de las pérdidas hizo que Egipcio continuase siendo una amenaza. Las acciones de uno contra uno de los norteafricanos no encontraban respuesta en la defensa del equipo español y el marcador se volvía a equilibrar (23-23, min.42).

A España le costaba ahora más en ataque y necesitaba su mejor defensa para frenar a la primera línea de los de García Parrondo, que arriesgaban metiendo a uno más en pista en lugar de su portero Hendawy. Las paradas de este le dieron la opción a los suyos de ponerse por delante, pero un nuevo gol de Antonio García, el más inspirado en el segundo acto, y la aparición de Dujshebaev permitieron a España tener la delantera para los cinco minutos finales (28-29).

Era el momento de la defensa, pero también la de Alex Dujshebaev, que volvió a coger las riendas. Atrás se subió la intensidad defensiva y el gran capitán dio aire (28-30) para los minutos decisivos, sin un pilar defensivo como Guardiola, expulsado tras tres exclusiones.

Pero la campeona de Europa ya tenía la mirada puesta en el bronce y aguantó agarrada al brazo de Dujshebaev, autor de dos goles claves. El último, la sentencia a segundos del final, tuvo la firma de un Raúl Entrerríos que pudo sonreír en su despedida a una carrera plagada de éxitos.