El consejero de Desarrollo Económico del Ejecutivo foral, Manu Ayerdi, ha explicado en la rueda de prensa tras la sesión que el Gobierno ha tomado esta decisión "tras escuchar a los agentes de la sociedad civil y hemos decidido modificarla". Así, "en lugar de sistema basado en el trabajo conjunto entre 20 personas de Desarrollo Económico y entidades colaboradoras lo haremos íntegramente con recursos públicos", ha dicho.

Ayerdi ha aclarado que este cambio "no afecta a los plazos comprometidos", que arrancarán el 2 de junio y terminarán el último día del mes siguiente a la finalización del estado de alarma. "La única diferencia es que en esta ocasión lo harán a través de la ficha correspondiente del catálogo de trámites del portal del Gobierno de Navarra", ha comentado, para insistir en que "lo más importante es que no afecta a los plazos".

Ha explicado también que hay otra modificación en la orden foral de manera que se ha cambiado ligeramente el condicionado. Ahora se tendrá en cuenta la reducción de facturación del mes de abril, "el peor mes del estado de alarma", tal y como ha incidido Ayerdi, en lugar del mes natural anterior a la solicitud de la ayuda, tal y como figuraba en la orden foral. "Esa modificación se va a publicar y es una buena noticia y demuestra el interés del Gobierno en reconocer el perjuicio que han tenido las personas en los momentos más complicados de la pandemia", ha expuesto.

Ayerdi ha querido "agradecer" a las 200 entidades colaboradoras que habían mostrado "su interés por colaborar con el programa" y ha comentado que "les trasladaremos la decisión del Gobierno de hacerlo con medios públicos".

Ha indicado que se ha adoptado la decisión porque "este Gobierno y este consejero son sensibles a las opiniones que desde el propio Gobierno y desde la sociedad se producen sobre las decisiones que se toman" y ha añadido que "había consenso de que tomar esta decisión era lo más adecuado".

Se han establecido dos tipos de ayudas. Por un lado, una de 2.200 euros a aquellos autónomos que tengan reconocida la prestación extraordinaria fijada por el Gobierno central dentro de las medidas urgentes extraordinarias para paliar los efectos de la crisis sanitaria y económica desatada por el Covid-19.

Y, por otro, una ayuda de 700 euros (que podría llegar a 800 en función de los rendimientos netos de todos los miembros de la unidad familiar), para quienes no cuenten con la prestación estatal pero hayan visto reducida su facturación en al menos un 30 por ciento.

En un primer momento, el Ejecutivo foral había previsto realizar la tramitación de estas ayudas a través de un sistema de trabajo conjunto entre personal de la Administración y entidades colaboradoras, entre ellas, asesorías, colegios profesionales y entidades financieras. Más de 200 ya habían mostrado interés por colaborar. No obstante, finalmente el Gobierno foral se ha decantado por la tramitación íntegra con recursos públicos. Para ello, será necesario reasignar recursos humanos de la Administración a esta campaña.

Los trabajadores autónomos interesados deberán realizar la solicitud a través de internet y serán los técnicos quienes gestionen las ayudas, tras comprobar el cumplimiento de los requisitos. El Gobierno de Navarra destinará 35 millones de euros a sufragar estas ayudas. En función de las solicitudes presentadas, el objetivo es poder realizar el primer abono el 24 de junio y, a partir de esa fecha, hacer pagos semanales.