Videojuegos solidarios

Sara Borondo
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PlayStation subasta objetos donados por más de 80 famosos del videojuego, el deporte y el entretenimiento

En los videojuegos son bastante habituales los eventos benéficos, ya sea mediante recogida de donativos con streamings, con la inclusión de mascotas o aspectos de personajes cuyas ventas estén destinadas a una ONG, pero probablemente ninguna haya sido tan ambiciosa como Club de Exploradores PlayStation, una iniciativa de PlayStation y Juegaterapia destinada a conseguir salas de juego en los hospitales para aquellos niños que están ingresados, con estancias equipadas con PlayStation 5 para jugar mientras estén hospitalizados y zonas de exploración. 

Más de 80 personas y empresas relevantes de ámbitos tan diferentes como los videojuegos, el deporte y el entretenimiento donan algún objeto o servicio relevante para ellos, desde el teclado con el que La Oreja de Van Gogh salió de gira por primera vez a las deslizaderas con las que Marc Márquez participó en el GP de Jerez de 2020, pasando por las botas con las que Sergio Reguilón debutó con el Tottenham, un cuadro que ha estado colgado en la habitación del streamer Ibai Llanos varios años, un vestido de competición de la campeona mundial de bádminton Carolina Marín o un Metal Gear Solid de la primera PlayStation propiedad de Jorge Cano, redactor jefe de Vandal, firmado por Hideo Kojima, creador del juego.

«Todos han participado en la iniciativa por decisión propia y han sido ellos los que han elegido qué objeto donar. Desde el principio tuvimos claro que el éxito de la acción pasaba por una implicación sincera y desinteresada, que fueran ellos quienes decidieran cuál era el artículo que tenía un valor sentimental para ellos y, sobre todo, para sus fans», explica Susana Martín, relaciones públicas y encargada de Compromiso PlayStation, la responsabilidad social corporativa de la empresa. «De momento   -explica- tenemos confirmada una sala en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid» con lo que se lleva recaudado.

La mecánica de Club de Exploradores PlayStation consiste en adquirir participaciones por valor de 5€euros que se adquieren a través de la web exploradoresplaystation.com. Todo el importe recaudado se destinará al proyecto de Juegaterapia. Cada objeto se sorteará entre quienes hayan comprado esas participaciones que, además, suponen entrar en el sorteo de una PS5. 

Juegaterapia nació a medidados de la primera década del siglo, cuando su fundadora, Mónica Esteban, regaló una consola a un niño enfermo de cáncer y se dio cuenta de que al pequeño se le pasaba más rápido el tiempo de quimioterapia. Desde entonces Juegaterapia, ahora fundación, ha llevado a cabo múltiples acciones destinadas a hacer más acogedores las zonas infantiles de los hospitales y que los niños jueguen mientras reciben tratamiento y así el tiempo pase más rápido. Numerosas empresas de videojuegos han colaborado con la ONG; entre ellas PlayStation, con una relación que se remonta a más de 10 años. «En este caso teníamos una motivación aun mayor: gracias a los resultados que se desprenden del estudio realizado por Juegaterapia y el Hospital de La Paz en Madrid, es posible afirmar que al jugar con videojuegos los pacientes oncológicos experimentaron una disminución del 20 por ciento en la administración de morfina y un aumento del 14 por ciento del tono parasimpático, responsable en gran medida de la recuperación del organismo, lo que favorece la curación», afirma Martín.