Tras el jarro de agua fría que supuso la recomendación de Salud de adelantar el horario de cierre de los bares de Tudela durante la semana de las ‘no-fiestas’, el Ayuntamiento de Tudela ha buscado la fórmula para paliar, en la medida en la que le es posible, el daño causado a los bares de la capital ribera.

Así, se ha tomado la decisión de dejar exentos del pago de las tasas de veladores lo que resta de año.

El alcalde Alejandro Toquero aclaró que “el departamento de Salud no nos dejó capacidad de movimiento ni de reacción posible ya que el mismo día 24, tras el no-cohete, nos hizo una recomendación que no esperábamos y que, ante los datos de contagios y hospitalizaciones, nos obligaban a acatar la medida”.

En este sentido, explicó que “desde el primer momento, el Ayuntamiento de Tudela ha estado del lado de la hostelería, dando toda la autorización posible para la ampliación de veladores y aplicando la exención de tasas, primero hasta julio y luego hasta agosto. Tras este nuevo palo al sector, que tenemos que acatar porque viene de Salud, lo único que está en nuestra competencia es aliviar económicamente desde el Ayuntamiento la carga que soporta la hostelería para que puedan compensar en lo que puedan las pérdidas de ese horario más restrictivo”. 

Por ello, la tasa de veladores no se cobrará hasta 2021, lo que supondrá  que el Ayuntamiento deje de ingresar en torno a 160.000 euros.