En Navarra, las escuelas infantiles privadas de 0 a 3 años dan cobertura a más del 30% de los menores, es decir, más de 2.000 niños y niñas. Estos centros denuncian "una situación insostenible ahora mismo" y lanzan un mensaje urgente: "Necesitamos abrir". "Si no nos dejan abrir hasta septiembre, muy pocas escuelas vamos a poder soportar los gastos", señalan.
Asimismo justifican que son "un servicio complementario a las escuelas públicas porque ellos no abarcan a todo el sector infantil" y, si no encuentran una solución, "el problema será de todos".