La inmunidad de grupo o de rebaño consiste en la existencia de un elevado porcentaje de individuos que hayan generado anticuerpos, de manera que el germen tenga más dificultades para encontrar un huésped vulnerable. Sin embargo, esto no se puede alcanzar de cualquier manera.
Hay dos modos de llegar a la inmunidad de grupo: la vacuna y que un 70% de la población lo haya pasado. Sin embargo, la vacuna no se espera que llegue hasta invierno de 2021 incluso el 2022 y el último estudio de seroprevalencia establece que solo el 5.2% de los españoles es inmune.
Además, este virus a diferencia de la gripe, no genera una inmunidad muy duradera. Es una incógnita si las personas que han generado anticuerpos están libres de poder adquirir la infección de nuevo.
Miriam Fernández Alonso, microbióloga de la CUN explica que "si se intenta hacer una inmunización a base de infección de grupo o de rebaño podríamos llegar a colapsar todos los sistemas sanitarios". Además, advierte que dejar que la infección "campe a sus anchas entre la población podría tener consecuencias adversas" y "podríamos provocar una situación incluso más grave que la de la primera ola de coronavirus".