Ion Cerviño juega de cierre. Técnicamente tiene mucha calidad, lee muy bien lo que le pide el partido, posee un gran disparo y es muy competitivo. Se trata de un líder para el grupo dentro del campo. Con tan solo 15 años debutó en el primer equipo del Osasuna Magna Xota; ahora, con el fin de disputar minutos, juega en el Tafatrans de Segunda División. Ha pasado también por todas las categorías de las selecciones navarras, ha estado convocado tres veces con la Selección Nacional Sub 17 y la pasada semana recibió la primera convocatoria con la Sub 18. Cerviñe nos cuenta esta nueva experiencia: “Representar a tu país es un  orgullo. Los entrenamientos han sido muy duros, pero es lógico ya que allí todos estábamos para ganarnos un puesto para el Europeo. Había gente muy buena; incluso jugamos un amistoso contra los Sub19, porque los que no somos tan mayores también les podemos quitar el puesto a los mayores”.(risas).
La lista para el Europeo estará conformada por jugadores Sub 18 y Sub 19.

Cerviño sabe que ahora le toca seguir demostrando en su club: “Hay que cambiar el chip y volver a la realidad del club. El regreso fue bueno, ganamos un partido muy importante en la cancha del Quel. Marcamos el 1-2 a falta de 40 segundos”.

Está acostumbrando a entrenamientos duros, a semanas sin descanso, pero él mantiene el paso firme hacia sus dos objetivos: “Me gustaría entrar en la convocatoria para jugar el Europeo y en un par de años poder jugar en el primer equipo de Osasuna Magna Xota”.

Ion Cerviño es de Irurtzun y Xota es un referente. Comenzó en el club y su contacto con el fútbol sala a los cuatro años: “Jugar aquí te parece lo más normal, pero cuando sales fuera te das cuenta que el Xota es un club importante en el panorama nacional y un referente como club de cantera. Los jugadores del Xota lo saben y, por ejemplo, a mí Dani Saldise, Asier o Roberto Martil me han ayudado mucho y me han dado buenos consejos. Me han dejado claro que más difícil que llegar es mantenerse”. 

Por su parte, Iosu Mendive es muy competitivo, tiene un manejo de ambas piernas brutal, gran conducción en velocidad, polivalente, con golpeo exterior y muy inteligente en los partidos atacando los puntos débiles de los rivales. Estas cualidades le han valido la llamada por primera vez de la selección Sub19. Una experiencia que ha merecido la pena vivir: “Ha sido increíble. Al principio estaba un poco nervioso. Cuando llegas a Las Rozas te parece todo un poco de película, entras en un mundo muy profesional. Ya desde la primera charla los seleccionadores nos dejaron claro que ahí estábamos para competir y ganar y no de vacaciones. El primer entrenamiento, hasta que logré quitarme los nervios fue el peor. Luego ya fue todo rodado. Los compañeros me acogieron muy bien; muchos me sonaban de haberme enfrentado en partidos con las selecciones territoriales”.

Le ilusionaría ir al Europeo: “La exigencia y el nivel es muy alto, pero reconozco que me haría ilusión. Sé que ahora tengo que seguir demostrando en mi club y si antes estaba enchufado, ahora mucho más”. El entrenador de su club, el CB Ibararte, habla mucho con él y le da consejos que le sirven para el presente y, seguro, que también para el futuro: “Lo que me ha costado es que pasas de jugar con chavales de tu edad en la selección a jugar contra gente más mayor en la competición, pero hay que seguir dándolo todo; sin relajarse”. 

La pandemia no es ajena a este buen momento. Por ejemplo es su último año con la selección navarra y es muy probable que no pueda disfrutarlo: “Es una pena, pero tenemos que aprender a vivir con esto y cumplir con todos los protocolos sanitarios. Yo no me junto con nadie. Trabajo y entreno; eso es todo lo que hago”.

El COVID 19 también le ha impedido continuar con sus estudios: “Las clases me las pasaron a las tardes para evitar aglomeraciones y me fue imposible compaginarlas con los entrenamientos. No aparco definitivamente los estudios, pero ahora trabajo de mecánico hasta las seis y a las siete empiezo a entrenar”.

Mendive está luchando por su sueño: “Sueño con disfrutar y poder vivir del fútbol sala. Hoy, de momento, disfruto, pero voy a seguir luchando para triunfar”. Y lo conseguirá.