El Banco de España en su sede de Madrid podría exponer monedas y billetes. También cajas fuertes centenarias con sus antiguas llaves... pero va a dar un giro a la tradición convirtiéndose en un espacio para el arte. Y así abre al público las puertas de una sala de exposiciones permanente para mostrar la amplia y variada colección de arte que atesora. La primera de ellas, 2.328 reales de vellón, mira a Francisco de Goya, el genial maestro de la pintura, que está estrechamente vinculado a la entidad.

La visita de este nuevo espacio, que inauguró ayer el Rey Felipe VI, se podrá hacer desde hoy mismo y será gratis, previa reserva en la web www.coleccion.bde.es.

La llave de la sala que ahora se abre giró en su puerta por primera vez en 1982 con una exposición, pero desde entonces no se había usado con este fin y su vocación de ahora es permanente.

«Queremos enseñar todo nuestro patrimonio, no solo artístico sino también documental. Este espacio tiene vocación de permanencia, el público que venga puede saber que siempre va a encontrar una exposición», explicaba Yolanda Romero, conservadora jefe del Banco de España.

La colección de arte del Banco de España está integrada por unas 4.000 piezas. La sala de arte se encuentra en el corazón de la sede principal del banco, a pocos metros del Museo Thyssen y el Prado, junto a la Plaza de Cibeles.

2.328 reales de vellón, la primera exposición de este espacio que estará abierta hasta febrero de 2022, viaja hasta el origen de la colección del Banco de España, entonces Banco de San Carlos.

El título hace referencia al dinero que se le pagó a Goya por el primer retrato que hizo del primer director del banco, José de Toro Zambrano y Ureta, encargo por el que cobró 2.328 reales de vellón, «poco para la época», según Romero.

Ese encargo fue muy importante para la carrera de Goya, que todavía no era pintor de cámara ni tan importante, explica Manuela Mena, una de las máximas autoridades del pintor en el mundo y que comisaria la exposición.

En la sala principal se han dispuesto los retratos de los primeros directores, gobernadores y miembros fundadores del banco, una decena de ellos pintados por Goya, con una disposición similar a lo que hubiera sido una reunión de la junta de la entidad, presidida por Carlos III, protector y primer accionista de la entidad.

Evolución del artista

En los distintos retratos se puede ver la rápida evolución que experimenta Goya en el inicio de su carrera. «Al principio se nota que hay como una sequedad, pero luego se ve una evolución inmensa, hasta convertirse en el retratista más importante de ese período», explica Mena.

«Sabe el personaje que tiene delante, y no deja de él nada», agrega. El pintor demuestra ya entonces una «perfección anatómica absoluta», con minuciosos detalles en manos y rostro, y su excepcional capacidad para reflejar la personalidad del retratado.

2.328 reales de vellón incluye una treintena de cuadros, una decena de Goya, pero también hay magníficas piezas de Mariano Salvador Maella, Vicente López o Federico de Madrazo.

El Banco de España quiere aprovechar este nuevo espacio para mostrar otros de sus tesoros: su inmenso archivo y su biblioteca, integrada por miles de documentos y libros. Así, incluye por ejemplo uno de los primeros libros de contabilidad del banco, en el que aparece el detalle del encargo a Goya y que fue clave para atribuirle estas obras.