El presidente del Parlamento de Líbano, Nabih Berri, ha anunciado este jueves un acuerdo marco con Israel para iniciar conversaciones con las que solucionar su disputa y delimitar sus fronteras marítimas y terrestres, proceso que estará encabezado por el Ejército libanés.
Berri ha indicado en rueda de prensa que las conversaciones tendrán lugar de manera indirecta a través de un "mecanismo tripartito" y ha precisado que "las dos partes han pedido a Estados Unidos que actúe como mediador y facilitador".
Así, ha detallado que "se celebrarán reuniones continuas en la sede de Naciones Unidas en Naqura bajo los auspicios del coordinador de la ONU", antes de agregar que "el acuerdo de demarcación marítima será posteriormente entregado" al organismo internacional.
El presidente del Parlamento libanés ha manifestado además que había pedido "personalmente" a Washington que "ayudara" en este tema y ha asegurado que "el acuerdo fue alcanzado en julio", antes de que Estados Unidos impusiera sanciones contra varios altos cargos libaneses, incluido su principal asesor.
"Yo, Nabih Berri, no me inclino ante las presiones", ha asegurado, al tiempo que ha defendido que "Líbano, a través de su Ejército, su resistencia y su pueblo, no pueden ser amenazados". "Queremos nuestro derecho y no renunciaremos a ello", ha añadido.
En este sentido, ha desvelado que "Estados Unidos pretende realizar todos los esfuerzos para crear una atmósfera positiva y constructiva entre las dos partes para concluir las negociaciones lo antes posible" y que Washington "reconoce que los gobiernos de Líbano e Israel están preparados para demarcar sus fronteras marítimas y terrestres".
Berri ha manifestado además que la empresa energética francesa Total "ha prometido iniciar las operaciones de exploración antes de que termine el año".
Por último, ha incidido en que ha pedido que la ONU demarque la frontera marítima con Israel "desde hace 10 años" y ha argüido que esta delimitación "ayudará a Líbano económicamente", según ha informado el portal libanés de noticias Naharnet.
Reacción de Israel
Minutos después del anuncio, el ministro de Exteriores de Israel, Gabi Ashkenazi, ha dado las gracias a Estados Unidos por sus "dedicados esfuerzos" para lograr el acuerdo marco y ha destacado que "se trata de un paso importante que llega tras tres años de contactos diplomáticos y que no habría sido posible sin la mediación de Estados Unidos".
"Creo que el éxito de las conversaciones afectará de forma significativa a la estabilidad de la región y promoverá la prosperidad de los ciudadanos de ambos pueblos en Israel y Líbano", ha señalado en un mensaje publicado a través de su cuenta en la red social Twitter.
En esta misma línea se ha expresado el ministro de Energía israelí, Yuval Steinitz, quien ha dado las gracias al secretario de Estado estadounidense, Mike Pompoe, por sus "esfuerzos y disposición a ayudar en este importante asunto".
"Aplaudo la mediación y la experiencia técnica estadounidense, que fortalecerá los intereses de Israel durante estas negociaciones", ha señalado Steinitz en un mensaje en Twitter.
EEUU aplaude la decisión
Por su parte, Pompeo ha aplaudido "la decisión de los gobiernos de Israel y Líbano de iniciar discusiones sobre la frontera marítima" y ha destacado que "este acuerdo histórico ha sido mediado por Estados Unidos y es el resultado de cerca de tres años de intensos contactos diplomáticos por parte del embajador (estadounidense en Turquía) David Satterfield y el subsecretario (para Asuntos de Oriente Próximo en el Departamento de Estado) David Schenker".
Así, ha resaltado a través de un comunicado publicado por el Departamento de Estado que estas conversaciones "tienen el potencial de lograr mayor estabilidad, seguridad y prosperidad para los ciudadanos libaneses e israelíes", antes de incidir en que se trata de "un paso vital hacia adelante que beneficia a los intereses de Líbano e Israel, la región y Estados Unidos".
"Ambos países han pedido que Estados Unidos participe como mediador y facilitador en las discusiones marítimas. Estados Unidos espera el comienzo temprano de las discusiones sobre la frontera marítima, que se celebrarán en Naqura, Líbano, bajo la bandera de la ONU y acogidas por el personal de la Oficina del Coordinador Especial de la ONU para Líbano (UNSCOL)", ha confirmado.
Por ello, Pompeo ha resaltado que "reconociendo la experiencia positiva del mecanismo tripartito, Estados Unidos espera también conversaciones paralelas a nivel de expertos para resolver los asuntos pendientes en la Línea Azul -la frontera terrestre entre ambos países-, que ofrecen la promesa de otro paso positivo para la estabilidad regional".
La Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) ha aplaudido igualmente el anuncio y se ha mostrado "dispuesta" para "extender a las partes todo el apoyo a su disposición" y a "facilitar los esfuerzos de cara a una resolución de estas negociaciones y avanzar a la demarcación de la Línea Azul".
"Bajo la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, la FINUL apoya cualquier acuerdo entre los dos países destinado a reforzar la confianza y a que las partes vuelvan a comprometerse con la santidad de la Línea Azul y el proceso amplio de demarcación fronteriza", ha zanjado.