El Chapalangarra, protagonista en las fiestas de Cintruénigo

Ángela Martínez
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Los cirboneros dan inicio a sus fiestas de San Juan con el tradicional cuelgue y volteado del 'Chapalagarra', un muñeco que simboliza lo malo y que se quema para acabar con ello.

Los vecinos de la localidad ribera dan el pistoletazo de salida a la festividad de su patrón San Juan con un programa repleto de actividades para todas las edades. Uno de los puntos más destacados ha sido el habitual cuelgue y volteo del Chapalangarra. 

El muñeco, de tamaño regular, ha sido protagonista de este evento. Esta mañana, se ha colgado del cuello y se ha elevado unos 10 metros mediante una cuerda tensada desde dos balcones de la plaza. El muñeco permanecerá colgado hasta esta noche, cuando se le descuelgue y se le trasporte a la hoguera. A continuación, se realizarán los tradicionales bailes de San Juan con Asociación Amigos de la Sanjuanera.

UNA TRADICIÓN MÁS QUE CENTENARIA 

Momentos de la celebración en CintruénigoMomentos de la celebración en Cintruénigo - Foto: NATV

Una de las finalidades principales de la tradición del Chapalangarra es rememorar a Miguel de Pablo, un capitán del ejército liberal que llegó a Cintruénigo en 1823 y provocó muchos conflictos entre la población. La leyenda dice que este general obligó forzosamente a muchos cirboneros a incorporarse a sus ejércitos, dejando desconsoladas a las jóvenes -conocidas tradicionalmente como 'las viudas'- al ver cómo sus hombres se iban lejos de la localidad navarra.

Respecto a la música, la noche de San Juan se tocaba la partitura de la "Sanjuanera", una jota cirbonera de autor desconocido que cuenta con una antigüedad mayor a 130 años. Con el paso de los años, esta composición musical se ha ido transmitiendo de generación en generación hasta llegar a la actualidad.