Uno de los momentos en los que más hurtos se producen en la piscina es justo en el instante en el que se los usuarios se van a bañar o entran en los vestuarios. 

Este pasado fin de semana, las piscinas de Pamplona han sufrido un gran número de robos. De hecho, desde Policía Municipal, aseguran que el teléfono de la oficina de denuncias ha sonado más de lo normal: "Hay mucha más gente en las piscinas y es más fácil aprovecharse de los descuidos para sacar beneficios".

Además, en muchas ocasiones, lo que se sustrae tiene un valor incalculable que, muchas veces, sobrepasa lo material. 

Piscina - Foto: NATV

A la hora de ir a darse un baño, cada bañista tiene sus propios trucos como puede ser turnarse, utilizar las taquillas o pedir a algún conocido que vigile las pertenencias. 

Estas son algunas situaciones que, especialmente en verano, se repiten a diario en todas las piscinas de la Comunidad foral.