The Idol, la serie de HBO protagonizada por Abel Tesfaye (The Weeknd) y Lily-Rose Depp con la firma de Sam Levinson (Euphoria), cumple sus propias promesas de un tórrido y perturbador relato sobre la industria musical. Y es que «la fama realmente corrompe» y eso «da mucho miedo», avanzó el equipo en el Festival de Cannes, donde se estrenaron los dos primeros episodios de la serie.
Tesfaye, que recientemente anunció su voluntad de dejar atrás el alias que le hizo famoso, explicó que buscaba «hacer un cuento de hadas retorcido y oscuro sobre la industria de la música» y todo lo que sabe de ella. «Mucho de Jocelyn (la cantante protagonista a la que interpreta Depp) se inspira en mi experiencia y en la de otros artistas de las que he sido testigo», admitió.
Para Levinson, «la fama realmente corrompe, es muy fácil rodearse de creadores de mitos» y hay algo acerca de todo ello que «da mucho mucho, miedo».
«Imaginamos que sabemos mucho más sobre esas personas de lo que sabemos de verdad», apuntó Depp sobre la construcción de su personaje. Consultados por los posibles paralelismos entre la protagonista y la cantante y bailarina estadounidense Britney Spears, Levinson aseguró: «no contamos la historia sobre ninguna popstar en particular, sino sobre cómo el mundo percibe a las estrellas y la presión que eso supone para ellas».
La producción, que se estrena el próximo lunes 5 de junio, cumple igualmente las advertencias respecto a su contenido explícito, algo que generó tanta expectación como polémica de cara al lanzamiento.
«Vivimos en un mundo muy sexualizado, especialmente en Estados Unidos», reflexionó el creador de la serie adolescente Euphoria, antes de opinar que «la influencia de la pornografía es realmente fuerte en la psique de los jóvenes». La «desnudez» física del personaje de Jocelyn es un reflejo, según la hija de Johnny Depp y Vanessa Paradis, de la propia «desnudez emocional» de la protagonista.
Lo que sí rechazó de plano el equipo fueron las acusaciones de caos creativo y de ambiente tóxico en el rodaje, publicadas en la prensa estadounidense. «Creedme, he estado en rodajes disfuncionales», indicó el actor Hank Azaria, que interpreta a uno de los miembros del «séquito» de la estrella protagonista, junto a Da'Vine Joy Randolph, Hari Nef, Jane Adams, el cantante Troye Sivan y la estrella de k-pop, la surcoreana Jennie Ruby Jane, cuya banda femenina Blackpink cuenta con una auténtica legión de seguidores.
«Sabemos que estamos haciendo un show que es provocativo, no se nos escapa», dijo Levinson, quien cree que los artículos «omitían» deliberadamente lo que no se ajustaba a su narrativa crítica. Pero cuando vio las noticias, él más bien estuvo seguro de que la serie sería el gran pelotazo del verano.
«Sé quién soy y creo que hay dos trabajos en este negocio: la tarea en sí y el gestionar el personaje (público). Esto último no es interesante para mí porque consume tiempo de trabajo. Son libres de escribir lo que quieran», afirmó.
The Idol, que venía anunciada como la historia de amor más sórdida de Hollywood, aborda la perturbadora relación entre un gurú de la autoayuda y líder de un culto moderno, interpretado por el intérprete y rapero Tesfaye, (conocido artísticamente como The Weekend) y un ídolo del pop en pleno ascenso -pero con muchos problemas- a la que da vida Lily-Rose Depp.
La producción, cocreada por Tesfaye, Levinson y Amy Seimetz, viene precedida por varias polémicas y controversias relacionadas con su supuesto contenido gráfico y sexual, además de por acusaciones de ambiente tóxico en el rodaje. Su desarrollo también siguió un camino pedregoso, con grandes revisiones creativas y costosas regrabaciones, de acuerdo a la prensa estadounidense.