Derrota por incomparecencia de Osasuna

Asier Cotelo
-

4
Real Madrid CF
0
CA Osasuna
Finalizado
Un equipo rojillo sin carácter cae ante un Real Madrid que ganó gracias a su pegada.

Derrota por incomparecencia de Osasuna

Dos goles de Bellingham, uno de Vinicius y otro de Joselu le dieron los tres puntos al Real Madrid en su duelo ante Osasuna. Un equipo navarro que salió al Santiago Bernabéu a verlas venir. Los de Jagoba Arrasate plantearon un partido sin mordiente en campo rival, dejando al equipo blanco que moviese el balón con facilidad. El plan visitante era acumular efectivos en campo propio con una defensa de cinco jugadores, para luego salir con verticalidad aprovechando la velocidad de Rubén Peña en la iquierda y de Jesús Areso en la derecha. 

Así, el Real Madrid se logró adelantar demasiado pronto, en su primer disparo a portería. Bellingham llegaba en segunda línea para mandar al fondo de la red una rápida jugada local, que supuso un 1-0 demasiado fácil. A partir de ahí, lejos de acelerar su juego, Osasuna continúo inmóvil ante un Real Madrid que jugaba a placer sabiendo que el tiempo corría a su favor. Tampoco los blancos crearon mucho peligro, dado que en toda la primera mitad sólo dispararon una vez entre palos, pero la parsimonia osasunista era evidente. Poco a poco el equipo pamplonés fue ganando presencia en campo rival y sin hacer demasiado puso en apuros al equipo merengue. Cumplida la media hora Rubén García no consiguió finalizar en condiciones un buen pase interior de Juan Cruz, como tampoco Ruben Peña logró canbecear a gol un centro medido al segundo palo. Ese rechazo le favoreció a Torró, pero se adelantó el defensor. De esa manera la llegada más peligrosa para Osasuna se iba a producir en la última acción del primer tiempo, cuando una nueva aparición de Rubén Peña, que jugó a pierna cambiada, su pase lo dejó pasar Torró y Budimir mandó el balón a las nubes sin oposición alguna. El delantero croata había tenido el empate en sus botas, gol que de haber entrado hubiera significado otro partido en la segunda mitad.

Al paso por vestuario el Real Madrid saltó al verde sabedores de que cualquier despiste como ese último con Budimir podía significarles un susto. Así que la maquinaria blanca salió con las pilas cargadas y Bellingham hizo el 2-0 en el minuto 54 tras una nueva jugada colectiva. Antes había sido Joselu el que se aprovechó de un fallo de David García, pero su remate raso se marchó rozando el poste. Osasuna parecía no reaccionar y ya en esta segunda mitad ni con balón estaba correcto. Pese a ello, en un envío al área local Ante Budimir fue derribado dentro del área en un claro empujón de Carvajal, pero nadie lo protestó. En la crontra a esa acción llegaría el 3-0 de Vinicius (min 63). La diferencia sería mayor cuando Joselu hizo el cuarto en el 69 de partido. Fue entonces cuando Jagoba Arrasate decidió mover el banquillo, dando entrada a jugadores que poco o nada pudieron hacer por cambiar la dinámica del choque.

Lo más destacado a partir de ahí estuvo en la actuación de Sergio Herrera, que otra vez fue protagonista. El meta rojillo paró un lanzamiento de penalti enviado por Joselu y cuando el meta rojillo agarró el esférico se giró a la grada de animación del Bernabéu para reírse de ellos. Un mal gesto que no tardó en pedir disculpas el propio Herrera. Se iban a añadir tres minutos de juego, pero no tuvieron mayor relevancia en un partido plácido para los locales y muy triste para los visitantes.