La asociación de consumidores Irache ha editado para vacaciones de verano una guía en la que ofrece consejos para protegerse del sol, ser cuidadoso con las comidas y al bañarse, controlar los gastos o proteger la salud.

Así a la hora de comer indica que es preferible una pieza de fruta completa que cortada porque si no se conservado en un lugar refrigerado o si se rompe la cadena de frío la cortada al carecer de piel tiene más riesgo de contaminación, por eso si es fruta cortada y está a temperatura ambiente es mejor optar por otros productos.

Y para todos los alimentos perecederos aconseja guardarlos en el frigorífico e intentar que el tiempo entre la preparación de la comida y su consumo sea el menor posible.

Para protegerse de una ola de calor señala Irache que hay que hidratarse de forma constante, no abusar de refrescos azucarados ni del alcohol, evitar comilonas y elegir platos ligeros y frescos, permanecer en lugares sombreados y frescos y minimizar la exposición al sol. Hay que poner además especial atención en los niños y en las personas mayores y ante cualquier síntoma de golpe de calor, acudir al médico.

El aire acondicionado puede ser un aliado en verano, pero usado con moderación y responsabilidad, limitando la temperatura y el tiempo de funcionamiento para evita enfriamientos y excesivos gastos, y sin olvidar que persianos, cortinas, toldos y ventilación en las horas más frescas también ayudan.

Para los documentos Irache recomienda conservar contratos y reservas tanto de alojamiento como de transporte o actividades para poder reclamar llegado el caso, y guardar también los justificantes de pago de cualquier producto que se adquiera o servicio disfrutado, y en caso de falta de acurdo ante un incumplimiento, dejar constancia por escrito del desacuerdo y pedir la dirección de la empresa para la correspondiente reclamación.

En cuanto a la protección solar, apuna que es imprescindible aplicarse cremas protectoras teniendo en cuenta el factor de protección UVB y aplicarse la crema cada dos horas y después de bañarse. Hay que tener en cuenta asimismo que hay cremas que contienen filtros como homosalate y octocrynele que no garantizan la inocuidad e incluso pueden afectar de alguna forma al sistema endocrino u hormonal y a la salud de algunas personas.

La guía de Irache recoge también consejos para las tarjetas de crédito, entre ellos un mayor control ya que los cambios de hábitos en vacaciones pueden aumentar los cargos y con ello pasar más desapercibidos los usos fraudulentos, y si nos roban la tarjeta, bloquearla cuanto antes y poner una denuncia.

Del mismo modo hay que prestar atención a las facturas en terrazas, donde pueden cobrar más si previamente se informa de ello, y precisa que son sobrecostes que deben incluirse en la carta de precios y en la factura. Y del mismo modo, los precios que se incluyan en la carta tienen que llevar incluidos los impuestos y si se pide agua en un restaurante puede ser de grifo y gratis.

Otras recomendaciones son utilizar gafas de sol y enr precaución en el baño y el uso de hinchables o colchonetas, para lo que se debe vigilar a los menores, utilizar zonas en las que se haga pie, comprobar que hay socorrista, hacer caso de banderas e indicaciones y ser cauto con corrientes y lugares rocosos.

Por último Irache recuerda que se debe llevar la tarjeta sanitaria, europea en caso de viajar a la UE, e informarse de las asistencias en otros países y, si no hay garantías de una atención adecuada, contratar algún seguro porque el coste de hospitalizaciones y tratamientos puede ser muy elevado, y para evitar disgustos en el domicilio, dar aviso de las vacaciones a familiares o amigos, no dejar las persianas totalmente cerradas, tender algo de ropa y, si se puede, programar el encendido y apagado de luces.