El jugador de Osasuna Pablo Ibáñez ha mostrado su ambición al afirmar que "esta Copa tiene que ir para nosotros" tan solo dos días después de marcar el gol que clasificó a su equipo para la final de Copa del Rey del 6 de mayo en Sevilla.

"Todos llevamos un par de días en una nube, y yo más aún. Tenemos que asimilarlo, pero ya estamos centrados en los seis partidos que tenemos de Liga antes la final", ha anotado el gran protagonista de San Mamés tras el entrenamiento de hoy en Tajonar.

Ha tildado de "increíble" la llega a la Plaza del Castillo a las 3 de la madrugada tras el choque en Bilbao: "Que 300 personas te estén venga dar las gracias se agradece. La gente lo siente de verdad y es lo más bonito que me ha pasado en la vida".

"Todo trabajo tiene su recompensa. Llevamos toda la vida dándole duro para alcanzar estos bonitos momentos, aunque no creíamos que fueran tan bonitos, pero es lo que tiene", ha valorado sobre todo el camino hecho en su carrera hasta llegar a este momento cumbre.

"Veo que Monca hace una pared. Sé que levanta la cabeza para poner buenos balones. Me gusta llegar y en cuenta vi que vino hacia mí, dije, esta es la mía. Pensé en controlar, pero dije, le pego y que sea lo que Dios quiera", recuerda sobre el tanto facturado en el minuto 116 que dio el pase a Osasuna.

Sobre la ejecución, Ibáñez piensa que "la posición del cuerpo es muy buena" y que se trató de un gol "soñado" con el que estrenó su cuenta anotadora con la camiseta del primer equipo.

De su rival en la final, el Real Madrid, Ibáñez hace da su aprobación: "El Madrid bien, porque así Abde puede jugar y estamos contentos. Vamos a por la final".

No descarta repetir con un gol en la final ante Courtois: "Hay que ser ambiciosos. Obviamente iremos a por ello, a por ese segundo gol y si es en la final de Copa imagínate".