Los años más calurosos registrados en nuestro país se concentraron en la última década: 2011, 2015, 2017 y 2019. Entre el 75% y el 80% de España está en riesgo de convertirse en desierto a lo largo de este siglo, según el Ministerio de Agricultura. La Agencia Europea del Medio Ambiente asegura que 7 de las 10 cuencas hidrográficas con mayor estrés hídrico de toda Europa se encuentran en territorio español. El 90% de los agricultores y ganaderos considera que el cambio climático es una prioridad y debería serlo también para las Administraciones.
Por realidades como las de esta lista nació Agricultores Contra el Cambio Climático (AC3), una iniciativa de Grano Sostenible que pretende concienciar a los profesionales del campo para que se comprometan activamente en la lucha contra el cambio climático y puedan así lograr más eficacia en sus explotaciones y mayor rentabilidad en sus cosechas. Está formada por ASAJA, UPA, Cooperativas Agro-Alimentarias de España y la Asociación Nacional de Obtentores Vegetales (ANOVE) y cuenta con el respaldo de administraciones y la comunidad investigadora y universitaria con la finalidad de ayudar a los productores agrarios a emplear buenas prácticas agrícolas y de concienciar a la sociedad en general acerca del indispensable valor que tiene el trabajo de los agricultores hoy en día. AC3 comenzó hace cuatro años en Castilla y León, se extendió posteriormente a Castilla-La Mancha y este año ha comenzado a implantarse en Aragón.
Lo cierto es que el cambio climático está sensibilizando y preocupando a la sociedad en su conjunto y particularmente al sector agrario. España, por su situación geográfica, es uno de los lugares del mundo más vulnerables a este fenómeno. La desertificación crece de un modo más acuciante que en otros lugares y nuestro país se ha convertido ya en el principal laboratorio europeo en el que poder estudiar los efectos del calentamiento global para aprender a adaptarse a ellos.
Y para conseguir esa adaptación AC3 propone medidas que, admiten, requieren esfuerzo, pero son imprescindibles para la supervivencia de los agricultores. Entre otras acciones, se deben gestionar eficazmente los suelos con una visión integral para optimizar la materia orgánica y es necesario reducir las pérdidas por erosión y las emisiones de gases efecto invernadero; además hace falta una mejora de la estructura y productividad a medio plazo. También se debe aprender a manejar mejor el agua progresando en la gestión del riego, adaptando las rotaciones de cultivos a la dotación disponible o empleando variedades más resistentes a la sequía, aseguran.
Sus propuestas también tocan temas como la mejora de biodiversidad y de los servicios de polinización, el impulso a la investigación y la digitalización o la creación de sistemas de asesoramiento. Y precisamente para eso, para asesorar a los agricultores, en la página web de la iniciativa (agricultorescontracambioclimatico.es) puede descargarse diverso material de manera gratuita con el que se pretende apoyar a quienes quieran modernizar sus explotaciones y su manera de trabajar. En estas guías se abordan aspectos como el abonado, la gestión de plagas o la agricultura de precisión, entre otros muchos. Además hay disponibles fichas didácticas para enseñar a los escolares lo que es y supone la agricultura en España.
Nuevo colaborador.
Tanto particulares como empresas e instituciones pueden colaborar con la difusión de estas guías y consejos de AC3 y el último en hacerlo, hace escasos días, fue el ayuntamiento soriano de Berlanga de Duero, que muestra así su sensibilidad con un problema real como es el del cambio climático y se hace partícipe de esta iniciativa que pretende mitigar sus efectos. Cuando todo apunta a que será necesario producir más con menos recursos y para ello el empleo de prácticas agrícolas sostenibles resulta fundamental, cobran más sentido iniciativas como la de Agricultores Contra el Cambio Climático. En este sentido, se toman como «algo fundamental concienciar a la población para que todos nos comprometamos activamente en la lucha contra el cambio climático en la medida de nuestras posibilidades; en este sentido, la formación de las nuevas generaciones es una responsabilidad prioritaria».
Por eso, la primera acción desarrollada en Berlanga de Duero fue una charla informativa dirigida a escolares del colegio municipal infantil y de primaria de esta localidad. Este acto se celebró para explicar a los más jóvenes cómo es la agricultura de hoy en día y el papel que juegan los agricultores y ganaderos ante el mayor reto al que se enfrenta el sector agrario, como es el cambio climático, y contó con la participación de varios expertos en el sector y además un agricultor del municipio.
«Los agricultores están cada vez más preocupados por un problema tan serio como es el del cambio climático; en los últimos años hemos sufrido las consecuencias de un cambio evidente tanto en lo respecta a las precipitaciones como al incremento de las temperaturas y ello está afectando muy notablemente a actividad agraria», explicó Elena Sáenz, integrante del Comité Ejecutivo de AC3. «Por eso -señaló Sáenz- Agricultores Contra el Cambio Climático va a continuar desarrollando su labor informativa entre los productores, y en colaboración con otros agentes, como en este caso el Ayuntamiento de Berlanga de Duero, para lograr la mayor eficiencia posible en los métodos de producción, sostenibilidad y rentabilidad».