Un 45% de las personas mayores que viven en residencias preferirían seguir en sus casas, según datos facilitados por la investigadora y coordinadora regional del proyecto 'Vivir mejor en casa' en Navarra, Nuria Carcavilla González, durante la 3ª Jornada Técnica celebrada en Pamplona.

La iniciativa, impulsada por la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) y la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), está financiado con fondos europeos Next Generation y tiene como objetivo buscar una mayor atención domiciliaria para retrasar el ingreso de personas mayores en residencias.

La apertura institucional del evento ha corrido a cargo del concejal delegado de Servicios Sociales, Deporte y Salud de Pamplona, Raúl Armendáriz; del concejal de Derechos Sociales de Estella-Lizarra, Carlos Rubio, y del vicealcalde de Pamplona y concejal delegado de Relaciones Ciudadanas, Participación y Mayores, Carlos Salvador.

Durante la jornada, Núria Carcavilla ha presentado los resultados preliminares de una prueba piloto que permitirá que algunas personas que viven en residencias de Navarra puedan volver a casa tras numerosas valoraciones y una amplia red de apoyo. La investigadora ha señalado que ocho de cada diez personas mayores que residen en estos centros presentan problemas físicos y cuatro de cada diez sufren trastornos mentales. Según el estudio, en el caso de las mujeres la situación es más grave, ya que tienen peor salud y el doble de probabilidades que los hombres de sufrir un grado de dependencia.

Para llevar a cabo el estudio, un grupo de especialistas ha evaluado el estado de salud y psicosocial de las personas que viven en residencias públicas de Navarra para determinar si podrían volver a casa con un plan personalizado. Finalmente, de las 24 personas incluidas en la segunda fase del proceso dos de ellas han podido realizar el proceso de transición.

Al margen de la opinión de los residentes, Carcavilla ha destacado que, en muchas ocasiones, son las familias las que se oponen a que vuelvan a sus domicilios. En este sentido, ha comentado que más del 50% de los familiares rechaza esta propuesta.

En la sesión, también se han presentado los resultados de otro estudio que se lleva a cabo en Catalunya, en las localidades de Reus (Tarragona) y Manresa (Barcelona). El investigador y coordinador regional del proyecto en Catalunya, Eduard Minobes, ha destacado que, después de tres meses de seguimiento, la tendencia apunta hacia "una mejora de la calidad de vida de las personas que viven en su casa con una intervención innovadora que incluye atención domiciliaria de lunes a domingo, formación a cuidadores no profesionales y promoción de la autonomía personal". "Hemos visto que la fragilidad también se reduce con la ayuda a domicilio, así como la sobrecarga que padecen los cuidadores no profesionales", ha añadido. Aunque ha señalado que los resultados son muy preliminares, ha confiado en que "esta tendencia lleve a unos resultados estadísticos significativos en unos meses".

Por otro lado, la jornada ha incluido la presentación del podcast 'Vivir mejor en casa', impulsado por las profesionales técnicas Andrea Rivero, Marina Salido, Leire Erro e Isabel Ollo, con la finalidad de divulgar conocimiento e información sobre las personas mayores y los procesos de desinstitucionalización.

El presidente de la SEGG, José Augusto García, ha sido el encargado de clausurar el evento. En su intervención, García ha reclamado un aumento de la financiación que se destina en España a los cuidados de larga duración, que "se sitúa actualmente en el 0,8% del PIB frente a la media europea del 1,5%". Además, ha insistido en la necesidad incorporar a las asociaciones que trabajan con distintos colectivos vulnerables en el diseño de políticas.

Respecto al proyecto 'Vivir mejor en casa', de CEOMA y la SEGG, ha recalcado que va "en contra del modelo que tenemos en España, muy basado en instituciones, y en contra de los intereses de muchas empresas y de una sociedad cada vez más individualista, poco generosa y poco intergeneracional". Para poder hacer posible que las personas mayores sigan en sus domicilios, García ha señalado la necesidad de apostar por "pisos con servicios para que puedan vivir en su barrio, con sus vecinos, con sus amigos, y participar de forma activa en las actividades". "En España tenemos un agujero enorme respecto al cambio en los modelos de vivienda", ha concluido.