No hay verano tranquilo para el Barcelona. Cuando parecía que había sorteado los obstáculos económicos mediante un acuerdo con LaLiga y el equipo comenzaba a carburar en la pretemporada con una buena victoria ante el Real Madrid, el Paris Saint-Germain voló por los aires la armonía tentando y convenciendo a Ousmane Dembélé para que firme por un club que lo ve como el posible recambio de Kylian Mbappé. Sin embargo, el galo frenó en seco ayer la operación, reclamando un entendimiento completo entre las partes.
El atacante francés renovó hace dos temporadas con el cuadro catalán, que acordó un contrato en el que el jugador incluyó una cláusula de rescisión que, entre los meses de junio y julio de este verano, se fijaba en 50 millones de euros y que, pasado el 31 de julio, ascendería a 100.
Es precisamente esa 'concesión' de la entidad azulgrana la que el club parisino ha querido aprovechar a última hora para hacerse con los servicios de Dembélé. Sin embargo, el futbolista acordó salir 'por las buenas' del Barça, al que pidió que negociara con el PSG, ya que no quería abonar su cláusula liberatoria a LaLiga a fin de alcanzar el acuerdo más beneficioso posible para las tres partes implicadas en la operación.
De esta forma, el tiempo del conjunto que dirige Luis Enrique se agotó, y posiblemente tenga que pagar por el galo más de 50 millones de euros. Según adelantaron ayer varios medios de comunicación, el Barcelona habría aceptado negociar con el Paris Saint-Germain, al que le otorga un margen de cinco días para llegar a un acuerdo, solo si la oferta es satisfactoria para los culés.
Después de que hace dos temporadas el club catalán diera por perdido a Dembélé tras finalizar su contrato, el llegar a la actual situación se antoja como positivo para un club tan lastrado por los problemas financieros como el Barça. Sin duda alguna, el más perjudicado es Xavi Hernández y el apartado deportivo de un bloque que estaba disfrutando de la mejor versión del atacante francés desde que aterrizara en el Camp Nou en 2017 tras la salida de Neymar Júnior por 135 millones de euros.
Viaja a Dallas
Así las cosas, Dembélé viajará con el equipo a Dallas, donde el Barcelona afrontará su tercera prueba de la pretemporada contra el Milan. Se entiende que el extremo no será de la partida en el encuentro amistoso ante los italianos y hasta podría no jugar ni un solo minuto si su situación sigue sin tener una solución visible.
Después de lograr una contundente victoria ante el Real Madrid en el último partido (3-0), el combinado dirigido por Xavi quiere seguir apuntalando su preparación de cara a un inicio de la competición liguera ya muy cercano. El Milan, que cayó en Estados Unidos ante el cuadro merengue, será esta madrugada el penúltimo escollo de los blaugranas en una puesta a punto que tiene pinta que deberá dar un bandazo, ya que, con la más que probable baja de Dembélé, la organización ofensiva del equipo cambiará por completo.