Navarra está sufriendo un aumento generalizado en los termómetros durante los últimos días y, de hecho, el Instituto de Salud Pública y Laboral mantiene la alerta sanitaria roja por altas temperaturas. Algunas personas se ven más perjudicadas que otras, como pueden ser los trabajadores que trabajan a pie de calle y que se ven obligados a lidiar con el calor día a día. 

Eneko Hernández, técnico de mantenimiento que se encarga de colocar el tendido de cable de la ciudad bajo el sol, asegura que para sobrellevarlo lo mejor posible "intentamos no machacarnos mucho". 

Otra trabajadora que también lo sufre es Edurne, una jardinera que se dedica a cuidar las flores de una rotonda pamplonesa. "Es muy sofocante mi trabajo pero, al menos, tenemos manguera para refrescarnos", reconoce entre risas.

Obreros trabajando al sol - Foto: NATV

Sin embargo, otros como los hosteleros intentan afrontar la calurosa jornada laboral de la mejor manera posible: "Mientras haya trabajo y haya salud, ya podemos estar contentos", dice Alejandro Moreno, camarero en la Plaza del Castillo de Pamplona. 

A pesar de las altas temperaturas, Juan José, animador en la Avenida de Carlos III de la capital navarra, reconoce que, para él, "es peor el frío del invierno".